Irán ha comenzado a enriquecer uranio en su planta subterránea de Natanz con un segundo tipo de centrifugadora avanzada, la IR-4, según ha informado el martes el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) en un informe obtenido por Reuters.
La medida es un nuevo incumplimiento por parte de Irán del acuerdo nuclear que firmó con las principales potencias en 2015.
“El 15 de marzo de 2021, el Organismo verificó que Irán comenzó a alimentar la cascada de 174 centrifugadoras IR-4 ya instaladas en la FEP con UF6 natural”, dijo el OIEA en el informe a los estados miembros fechado el lunes, refiriéndose al hexafluoruro de uranio, la forma en que el uranio se alimenta en las centrifugadoras para su enriquecimiento.
Irán ha reducido sistemáticamente su cumplimiento del acuerdo de 2015 en respuesta a la retirada del mismo por parte del expresidente estadounidense Donald Trump en 2018.
El OIEA informó el mes pasado que Irán había añadido 17,6 kilogramos (38,8 libras) de uranio enriquecido hasta el 20% a sus reservas hasta el 16 de febrero.
Irán también aumentó sus existencias totales de uranio enriquecido a 2.967,8 kilogramos (6.542,9 libras), frente a los 2.442,9 kilogramos (5.385,7 libras) notificados el 2 de noviembre, dijo el OIEA.
Como parte de sus medidas para reducir el cumplimiento del acuerdo nuclear de 2015, la República Islámica puso fin recientemente a la aplicación del Protocolo Adicional del acuerdo nuclear de 2015, que permite al OIEA llevar a cabo inspecciones rápidas en lugares no declarados al organismo.
Sin embargo, el jefe del OIEA, Rafael Grossi, visitó posteriormente Teherán, donde llegó a un acuerdo con Irán para continuar con algunas actividades de verificación y supervisión en el país.