El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) confirmó que la planta de enriquecimiento de combustible de Fordo y el reactor de agua pesada de Khondab, en construcción, no presentan daños tras los recientes ataques israelíes en Irán. La declaración desmiente reportes previos sobre un supuesto ataque a Fordo, negado por Israel.
La agencia nuclear de la ONU también informó que no se detectaron nuevos daños en Natanz, donde las fuerzas israelíes atacaron un objetivo nuclear el viernes. Según el OIEA, las instalaciones en este sitio permanecen estables tras los bombardeos.
El organismo señaló que la Autoridad Reguladora Nuclear de Irán reportó niveles de radiación normales fuera del complejo nuclear de Isfahán, otro lugar impactado por la ofensiva aérea israelí. Sin embargo, cuatro estructuras críticas en Isfahán, incluidas una planta de conversión de uranio y una de fabricación de placas de combustible, sufrieron daños.
En una publicación en X, el OIEA aclaró que no se anticipan incrementos de radiación fuera de Natanz ni de Isfahán, lo que descarta riesgos inmediatos para la población o el medioambiente en las áreas afectadas.