GINEBRA (AP) – Las fuerzas de seguridad iraníes estaban “disparando a matar” en su mortífera campaña contra los manifestantes en las últimas semanas, según un video creíble, dijo el viernes la jefa de derechos humanos de la ONU.
Los disturbios dejaron por lo menos 208 personas muertas en todo el país, dijo la oficina de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos Michelle Bachelet, haciéndose eco de un recuento también realizado por Amnistía Internacional. Irán cuestiona las cifras del número de víctimas mortales publicadas por organizaciones extranjeras, pero hasta ahora se ha negado a dar cifras de bajas o detenciones en todo el país.
Bachelet dijo que las imágenes recibidas por su oficina parecen mostrar que los manifestantes fueron asesinados a tiros mientras huían, o que les dispararon “directamente en la cara y los órganos vitales”.
Tales acciones equivalen a “graves violaciones de los derechos humanos”, dijo Bachelet. Instó a Irán a que permita investigaciones independientes de las violaciones y a que libere a todos los manifestantes que fueron injustamente despojados de su libertad durante la represión.
“Las imágenes de video verificadas indican que se usó violencia severa contra manifestantes, incluyendo miembros armados de las fuerzas de seguridad que dispararon desde el techo de un edificio del Departamento de Justicia en una ciudad, y desde helicópteros en otra”, dijo Bachelet.
“También hemos recibido imágenes que parecen mostrar a las fuerzas de seguridad disparando a manifestantes desarmados por detrás mientras huían, y disparando a otros directamente a la cara y a órganos vitales, en otras palabras, disparando a matar”, añadió.
La oficina de Bachelet dijo que había recibido muchas denuncias de malos tratos contra personas detenidas, “incluso con el aparente objetivo de obtener confesiones forzadas”.
Las manifestaciones comenzaron a mediados de noviembre, después de que el gobierno subiera los precios mínimos de la gasolina. La gasolina barata es prácticamente considerada un derecho de nacimiento en Irán, hogar de las cuartas reservas de petróleo crudo más grandes del mundo a pesar de décadas de problemas económicos. Esa disparidad, especialmente dada la riqueza petrolera de Irán, alimentó la ira de los manifestantes.
El número de víctimas, de al menos 208, es el más sangriento de los disturbios en Irán desde la época de la Revolución Islámica. Las protestas del Movimiento Verde de 2009 que siguieron a las disputadas elecciones presidenciales atrajeron a millones de personas a las calles pero vieron muchos menos asesinatos.
Las manifestaciones muestran el descontento económico generalizado que aflige a Irán desde mayo de 2018, cuando el presidente Donald Trump impuso sanciones aplastantes tras retirar unilateralmente a Estados Unidos del acuerdo nuclear que Teherán firmó con las potencias mundiales. Esa decisión ha visto a Irán empezar a romper los límites del acuerdo, así como una serie de ataques en todo el Medio Oriente que Estados Unidos ha culpado a Teherán.