El presidente Masoud Pezeshkian asumió oficialmente como el noveno presidente de la República Islámica de Irán en una ceremonia celebrada ante el Parlamento el martes, donde estuvieron presentes dignatarios internacionales, incluidos representantes de los grupos terroristas Hamás, Hezbolá, la Yihad Islámica y los Hutíes.
Pezeshkian, considerado por algunos como un reformista, ganó en la segunda vuelta electoral contra el candidato ultraconservador Saeed Jalili el pasado 5 de julio. Reemplaza al presidente Ebrahim Raisi, quien murió en un accidente de helicóptero en mayo. La ceremonia de investidura tuvo lugar dos días después de que el líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, otorgara oficialmente los poderes presidenciales a Pezeshkian, un cirujano cardíaco de 69 años.
En el acto, que fue transmitido en vivo por la televisión estatal, Pezeshkian declaró: “Yo, como presidente, frente al Sagrado Corán y el pueblo de Irán, juro ante Dios todopoderoso ser el guardián de la religión oficial, del sistema de la República Islámica y de la constitución del país”. Se espera que el nuevo presidente presente su gabinete en un plazo de dos semanas, tras haber obtenido más de 16 millones de votos en la segunda vuelta, lo que representa aproximadamente el 54% de los votos emitidos.

La ceremonia contó con la presencia de altos funcionarios de diversos países, entre ellos Armenia, Tayikistán, Egipto, Sudán, Irak, Turquía, Arabia Saudita, Azerbaiyán, Cuba y Brasil. Además, asistió el enviado de la Unión Europea, Enrique Mora. Entre los asistentes también se encontraban líderes de aliados regionales respaldados por Irán, como el líder terrorista Ismail Haniyeh de Hamás y Ziyad al-Nakhalah de la Yihad Islámica. Hezbolá estuvo representado por Naim Qassem, mientras que los islamistas hutíes enviaron a su portavoz, Mohammed Abdulsalam.
Ese mismo día, Haniyeh y Nakhalah se reunieron con Jamenei y Pezeshkian, tras lo cual el nuevo presidente emitió un comunicado reafirmando el apoyo a la causa palestina. “El apoyo a la causa de la nación palestina oprimida continuará con fuerza, y ningún factor podrá perturbar nuestra voluntad en esta dirección”, aseguró Pezeshkian.
La ceremonia se produjo en medio de la preocupación por un posible conflicto total entre Israel y Hezbolá, después de un ataque con cohetes desde el Líbano que el sábado mató a 12 niños en un campo de fútbol en Majdal Shams, en los Altos del Golán. Durante el evento, el presidente del Parlamento iraní, Mohammad Bagher Ghalibaf, criticó lo que calificó como los “crímenes” de Israel en Gaza, mientras algunos asistentes coreaban: “Muerte a Israel, muerte a Estados Unidos”.
El lunes, Pezeshkian advirtió a Israel sobre las “graves consecuencias” de un ataque al Líbano, destacando su apoyo al “eje de la resistencia”, que incluye a grupos terroristas alineados con Teherán como Hezbolá y los hutíes en apoyo a Hamás.

Pezeshkian fue el único candidato reformista aprobado por el Consejo de Guardianes, dominado por conservadores, para las elecciones presidenciales. Durante su campaña, el exministro de Salud prometió intentar revivir el acuerdo nuclear de 2015 con las potencias mundiales, el cual se desmoronó en 2018 tras la retirada de Estados Unidos. Ha abogado por “relaciones constructivas” con Europa, aunque ha criticado a los países europeos por no cumplir sus compromisos para aliviar el impacto de las sanciones estadounidenses renovadas.