El presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, responsabilizó el jueves a su administración por el incremento del costo de vida, lo que aumentó la presión sobre los encargados de dirigir una economía debilitada por las sanciones internacionales. Según el centro oficial de estadísticas, la inflación anual alcanzó casi el 49 por ciento en septiembre.
Pezeshkian afirmó que el exceso de burocracia del Estado impulsaba la inflación. “Nosotros, el gobierno, somos la causa de la inflación”, declaró durante un discurso en la provincia del Kurdistán. Añadió que el aparato estatal se había sobredimensionado y aseguró que se tomaban medidas para reducir gastos y controlar los precios.
La economía iraní permanece afectada por las sanciones impuestas por Estados Unidos y otras potencias occidentales, que acusan a Teherán de intentar desarrollar un arma nuclear. Irán rechaza esa acusación, aunque ha enriquecido uranio a niveles sin uso civil, ha restringido el acceso de los inspectores y ha expandido sus misiles balísticos.
El deterioro financiero se agravó tras una guerra de doce días en junio, cuando Estados Unidos se unió brevemente a Israel en ataques contra instalaciones nucleares iraníes. Israel justificó la ofensiva alegando que los programas nucleares y de misiles del régimen iraní representaban una amenaza inmediata y existencial para su seguridad nacional.
la guerra ocurrió después de dos meses de negociaciones nucleares entre Teherán y Washington que concluyeron sin ningún avance diplomático. Según la Organización de Administración Pública y Reclutamiento, Irán cuenta con más de 2,4 millones de empleados civiles en el sector estatal, sin incluir personal militar, policial o de los ministerios de defensa e inteligencia.
Pezeshkian advirtió que el déficit presupuestario agravaba las dificultades económicas. Instó a los funcionarios a eliminar gastos innecesarios para reducir la carga sobre los ciudadanos y aliviar la presión generada por el aumento de los precios y la ineficiencia del aparato gubernamental que, según dijo, había perdido control sobre el equilibrio fiscal del país.
