El jueves se difundieron imágenes del Gran Rabino de Irán, Yehuda Gerami, en la Tumba de Mordejai y Ester, ubicada en la ciudad de Hamadán, durante la festividad de Purim. En los registros, se observa al rabino leyendo el Libro de Ester y bailando junto a estudiantes.
De acuerdo con la emisora pública Kan, el rabino y sus alumnos realizaron danzas en el exterior del complejo antes de la oración vespertina de Minjá, en la víspera de Purim. Posteriormente, Gerami llevó a cabo la lectura del Libro de Ester desde un rollo de la meguilá, en cumplimiento de la tradición de la festividad.
Según una creencia que data al menos del siglo XII, Mordejai y Ester fueron sepultados en un mausoleo en Hamadán, identificado con la antigua Shushan mencionada en el Libro de Ester. Esta tradición es aceptada principalmente dentro de la comunidad judía iraní, pero no cuenta con respaldo generalizado fuera de ella.
Irán alberga aproximadamente 8.500 judíos, concentrados en Teherán, Isfahán y Shiraz. Antes de la Revolución Islámica de 1979, la población judía en el país superaba los 100.000.
En un aparente intento de resguardar a sus miembros, líderes de la comunidad judía iraní emiten periódicamente declaraciones alineadas con la postura del régimen, incluyendo pronunciamientos antiisraelíes.
Tras la detención de varios judíos en Teherán durante las protestas de 2022, el Comité Judío Central de la capital manifestó su respaldo al gobierno iraní en medio de la violenta represión de las manifestaciones.
En 2021, Gerami condenó públicamente el asesinato del comandante de la Fuerza Quds, Qassem Soleimani, por parte de Estados Unidos en 2020, expresando preocupación por posibles represalias contra judíos por parte de sectores musulmanes.
Irán mantiene su compromiso declarado de destruir Israel y proporciona financiamiento a grupos terroristas como Hezbolá y Hamás, organizaciones que también buscan dicho objetivo.