Cinco documentos secretos que supuestamente muestran los planes iraníes para hackear infraestructuras en países occidentales, incluso en Europa, fueron publicados por Sky News el lunes.
Aunque se ha informado de este tipo de hackeos por parte de Irán y otros países en el pasado, es inusual que un medio de comunicación obtenga documentos reales de planificación interna de la Unidad 13, la unidad cibernética del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI).
Algunos de los posibles hackeos, que el grupo cibernético del CGRI podría estar planeando según el informe, serían contra el sistema de agua de lastre de un buque de carga. Esto podría causar un daño irreparable al barco.
El sistema de agua de lastre ayuda a equilibrar el barco en ciertas circunstancias bombeando agua a tanques especiales del barco, y la manipulación del sistema podría dañar este proceso crucial.
Otro complot iraní parecía consistir en hackear el medidor automático de los tanques de ciertas estaciones de combustible, lo que podría detener el flujo de gas o, en el peor de los casos, incluso provocar una explosión, según el informe.
Además, las 57 páginas describían los intentos de hackear los dispositivos de comunicación marítima.
Sky News entrevistó al Secretario de Defensa del Reino Unido, Ben Wallace, quien habló de forma más general sobre el tipo de amenazas descritas en los documentos como graves y claramente no las negó.
Otra fuente anónima del reportaje dijo que los documentos describían las primeras etapas de la planificación de un ciberataque, pero no aclaró hasta dónde llegaban los planes.
No estaba claro quién filtró los documentos, pero la filtración parecía diseñada para avergonzar a Irán ante los países europeos para influir potencialmente en sus opiniones sobre una serie de cuestiones relativas a la República Islámica.
En la actualidad, existe un enfrentamiento sobre si Irán y Estados Unidos volverán al acuerdo nuclear JCPOA de 2015, y socavar la confianza de la UE en Teherán podría también desestabilizar esas negociaciones, ya de por sí tensas.
La UE ya ha dado la espalda a Irán diplomáticamente después de que se descubrieran operaciones terroristas del CGRI en Europa continental, pero no ha tomado públicamente represalias utilizando la fuerza como lo han hecho a veces Estados Unidos e Israel (o al menos cuando se les atribuyen ataques).