El alcalde de Jerusalén, Moshe Lion, afirmó que los cambios que está realizando en la ciudad, desde el aumento del reciclaje, la reducción de la contaminación y la incorporación de espacios de oficinas de alta tecnología, hasta la inversión en infraestructuras, tienen como objetivo beneficiar por igual a judíos y árabes.
En su intervención del lunes en la conferencia de The Jerusalem Post en Nueva York, Lion dijo que la mejor prueba de ello es un centro tecnológico de 2.000 metros cuadrados que el ayuntamiento está construyendo en el este de Jerusalén y que, según predijo, traerá oportunidades e inversiones tanto de empresas israelíes como internacionales.
En los últimos años, la capital se ha transformado en un centro de alta tecnología, dijo el alcalde, con más de 600 empresas de alta tecnología con sede en la ciudad que emplean a más de 20.000 personas. Para ello, Lion dijo que la ciudad está construyendo 1,6 millones de metros cuadrados de espacio de trabajo y oficinas de alta tecnología en toda la ciudad, tanto en Jerusalén Este como Oeste, durante los próximos tres años.
Lion afirmó que Jerusalén es un mosaico de culturas, tradiciones e identidades y dijo a los asistentes a la conferencia que es su responsabilidad garantizar que los grupos dispares que componen la población de la ciudad tengan el espacio y la oportunidad de construir un futuro compartido en la ciudad.
León agradeció a los amigos de Jerusalén en Nueva York y en todo Estados Unidos y el mundo su apoyo y sus oraciones por la ciudad. “Nada de lo que conseguimos sería posible sin vuestro apoyo”, dijo Lion, que invitó a los asistentes a visitar Jerusalén.