El alcalde de Jerusalén, Nir Barkat, defiende una medida para congelar los activos de la iglesia hasta que paguen millones en impuestos atrasados a la ciudad.
La Iglesia del Santo Sepulcro cerró el domingo sus puertas hasta nuevo aviso ya que los líderes de la iglesia tomaron represalias contra lo que ven califican de una «campaña sistemática de Israel para dañar a la comunidad cristiana en Tierra Santa».
Parte de eso es la reciente decisión del Municipio de Jerusalén de congelar los activos de las iglesias hasta que paguen los millones de shekels que la ciudad reclama como impuestos no pagados.
«La iglesia del Santo Sepulcro y los lugares de culto de todas las iglesias están exentos de impuestos municipales y esa es la forma en que se mantendrá«, tuiteó Barkat.
«¿Pero suena lógico para alguna persona que las propiedades comerciales como hoteles, pabellones y negocios estén exentos solo porque pertenecen a las iglesias?»
«¿Por qué debería el hotel Mamila pagar impuestos y el hotel Notre Dame, que está justo enfrente, estar exento?», Pregunta.
Barkat dice que las iglesias deben unos 650 millones de NIS en impuestos atrasados
«No estoy preparado para que los residentes de Jerusalén tengan que cargar con estas enormes sumas«, dice.