Francia condenó el lunes a Israel por demoler casas árabes palestinas ilegales cerca de Jerusalén, diciendo que la destrucción sentó un “precedente peligroso” y violó el derecho internacional, informó AFP.
“Francia condena la demolición por el ejército israelí de varios edificios en la zona de Wadi al Hummus, en el sureste de Jerusalén”, ha declarado el Ministerio de Asuntos Exteriores francés.
“Estas demoliciones han tenido lugar por primera vez en una zona controlada por la Autoridad Palestina en virtud de los Acuerdos de Oslo. Representan un precedente peligroso, que representa una amenaza directa para la solución de los dos Estados”, añadió.
El lunes por la mañana, las fuerzas israelíes sellaron y comenzaron a demoler diez de las más de 100 estructuras construidas ilegalmente y levantadas en contra de una orden de la Administración Civil israelí de 2011 que prohibía la construcción cerca de la valla de seguridad.
Los edificios de apartamentos fueron construidos en el barrio Wadi al-Hummus de Sur Baher, un enclave árabe situado casi exclusivamente en Jerusalén.
Sin embargo, la franja de tierra en la zona de Wadi al-Hummus, donde se encuentran las estructuras ilegales, se encuentra justo fuera de las fronteras municipales de Jerusalén, pero en el lado de Jerusalén de la valla de seguridad.
La Unión Europea condenó formalmente el lunes a Israel por la demolición de los edificios árabes ilegales, diciendo que las demoliciones socavan la “viabilidad de la solución de dos Estados”.
La Autoridad Palestina, por su parte, acusó a Israel de llevar a cabo “una masacre” e hizo un llamamiento a la comunidad internacional para que “intervenga inmediatamente y ponga fin a la agresión israelí”.