Los ciudadanos de Jerusalén mostraron su satisfacción el miércoles tras la victoria electoral de Donald Trump en Estados Unidos, con la expectativa de que pueda contribuir a detener los conflictos que asolan Oriente Medio. Algunos incluso lo consideraron como “parte del plan divino”.
Esther Henderson, una residente de 44 años, comentó a la AFP desde el concurrido mercado Mahane Yehuda que: “Creo en Dios, así que esto es parte de su plan”. Para ella, el resultado es una señal de que el “lado malvado y corrupto, el globalismo, está empezando a decaer”, aunque aclaró que “no es que sea una gran admiradora de Trump”, pero sí se siente decepcionada por la situación mundial actual.
Recientes sondeos reflejan que la mayoría de los israelíes, un 66%, según una encuesta del Canal 12 de Noticias de Israel, esperaban que Trump volviera a la Casa Blanca. Ese mismo sentir fue compartido por numerosas personas en el mercado de Jerusalén al conocerse la victoria del exmandatario estadounidense.
“Esto es excelente, es bueno para los judíos”, declaró Yossi Mizrachi, un comerciante de frutas de 51 años. Añadió que ahora “solo necesitamos que nos proporcione armas”, y confía en que Trump sea capaz de “poner fin a las guerras”.
En una cafetería cercana, Yechiel Hajbi, de 57 años, también se mostró “muy contento” con la victoria de Trump y expresó su esperanza de que su regreso “traiga la paz”. Hajbi confía en las habilidades comerciales de Trump para lograr un nuevo acuerdo de paz similar a los Acuerdos de Abraham de 2020. “Es fuerte… creo en él”, afirmó. Según Hajbi, Trump “puede lograr la paz con los árabes”, ya que cree que “les cae bien”.
Por otro lado, Hajbi se mostró menos impresionado por la rival demócrata de Trump, Kamala Harris, a quien calificó de “débil”, argumentando que no sería capaz de manejar los complejos conflictos del Medio Oriente.
Natan Shlomo, de 36 años, compartió una visión similar y no cree que Harris sea capaz de cumplir con su promesa de apoyar a Israel. En su opinión, Trump “actuará como un hombre, como debe hacerlo un hombre clásico”.
Sin embargo, no todos los compradores del mercado compartían el mismo entusiasmo. Assa Izhar, de 63 años, quien se encontraba de visita en Jerusalén desde la ciudad de Modiin, expresó sentimientos encontrados acerca de Trump. “Me preocupa un poco porque lo considero inestable y eso podría afectarnos”, explicó. A pesar de ello, reconoció los logros de Trump, como los Acuerdos de Abraham, y espera que “no inicie nuevas guerras, sino que las termine”.
Por su parte, Dganit Yasmin, de 56 años, también expresó sus dudas sobre el impacto de Trump en Israel. “La verdad es que no sabía a quién prefería”, confesó, destacando que tanto Trump como Harris le generaban preocupación. Yasmin concluyó diciendo que lo más importante para ella es que quien sea elegido “sea bueno con Israel” y apoye los intereses del país, aunque reconoció que “a veces Trump tiene opiniones inestables”.