La decisión de trasladar la Embajada de EE.UU a Jerusalén en mayo del presenta año puede privar a esta región del Oriente Medio de la última oportunidad para la paz, declaró el secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Aboul Gheit, quien condenó esta decisión.
«La decisión de EE.UU es un eslabón más de la cadena de provocaciones y acciones erróneas que continúa desde diciembre del año pasado, esta decisión puede eliminar la última esperanza de paz y coexistencia de los palestinos e israelíes», señaló.
Según el funcionario, EE.UU está perdiendo prestigio como mediador del proceso de paz en Oriente Medio.
«La decisión de EE.UU de trasladar la embajada en el día de la Nakba es un testimonio de la actitud totalmente prejuiciada a favor de Israel y de la carencia de una valoración racional de la esencia e historia del conflicto regional que dura ya setenta años», indica el comunicado.
EE.UU anunció que abrirá su nueva embajada en Jerusalén el 14 de mayo con ocasión del 70 aniversario de la independencia del Estado de Israel, fecha que en el constructo ideológico promovido por el architerrorista nacido en el Cairo – Egipto, Yasser Arafat, es denominada “Nakba”, que significa “Catástrofe”.
A principios de diciembre pasado, el presidente de EE.UU, Donald Trump, anunció la decisión de trasladar la Embajada estadounidense en Israel de Tel Aviv a Jerusalén, la Capital del Estado Judío.
La decisión del mandatario norteamericano fue condenada por la mayoría de los países musulmanes, donde se suscitaron manifestaciones violentas, y generó críticas de otros Estados e instituciones internacionales.
La Asamblea General de la ONU aprobó por amplia mayoría una resolución que declaró nula la decisión estadounidense de reconocer Jerusalén y exhortó a todos los países a que se abstengan de establecer misiones diplomáticas en la Ciudad.