El lunes por la tarde, un grupo de líderes religiosos locales pegó una carta en el muro exterior de la catedral ortodoxa rusa de la Santísima Trinidad de Jerusalén, en la que se pide al Patriarca ortodoxo ruso Kirill que solicite al presidente ruso Vladimir Putin que “tome medidas inmediatas para desactivar el conflicto [en Ucrania] y busque una solución pacífica”.
“Nos entristece ver los combates, que enfrentan principalmente a los cristianos ortodoxos”, dice la carta. “El conflicto actual ya ha provocado una importante pérdida de vidas, tanto entre los combatientes como entre los civiles”.
La carta también advierte de una posible guerra entre las potencias nucleares.
Kirill, de 75 años, es un estrecho aliado de Putin y comparte la visión de una Rusia musculosa que defiende los valores cristianos tradicionales frente a un Occidente inmoral. Sus declaraciones públicas sobre la guerra entre Ucrania y Rusia han sido coherentes con la retórica de Moscú.
“Me pareció importante que en un acto público de líderes religiosos en Tierra Santa se afirmara la importancia de la paz y se pidiera públicamente al Patriarca Kirill de la Iglesia Ortodoxa Rusa que hablara con el presidente Putin para buscar la paz”, dice el rabino Yonatan Neril, fundador y director del Centro Interreligioso para el Desarrollo Sostenible, a The Times of Israel.
“Los líderes religiosos de Tierra Santa tienen autoridad moral”, continúa. “Es importante que no se queden callados. Es importante que hablen, y hoy lo han hecho”.
Neril, que organizó el acto, se puso en contacto con los dos archimandritas ortodoxos rusos de Jerusalén, uno de los cuales respondió diciendo que se lo había transmitido al otro clérigo, que estaba en contacto directo con el Patriarca Kirill.
Participan en el acto el Patriarca Latino Pierbattista Pizzaballa, la reverenda Karin Ekblom del Instituto Teológico Sueco, el jeque musulmán Hassan Abu Galion de Rahat, el rabino Rasson Arousi de la Comisión de Diálogo con la Santa Sede del Gran Rabinato, el Director Internacional de Asuntos Interreligiosos del Comité Judío Americano, el rabino David Rosen, así como otros líderes drusos, musulmanes, cristianos y judíos.