Miles de agentes de policía fueron desplegados en alerta alta alrededor de la Ciudad Vieja de Jerusalén el viernes por la mañana en previsión de disturbios violentos por parte de los musulmanes por la instalación de detectores de metales en Israel en el complejo del Monte del Templo.
El gabinete de seguridad de alto nivel defirió a la policía de Israel tomar la decisión final sobre el aumento de las medidas de seguridad alrededor del lugar sagrado, que se establecieron tras un ataque terrorista el viernes pasado en el Monte del Templo, en el que dos musulmanes asesinaron a dos oficiales de policía israelíes.
“El gabinete ha autorizado a la policía de Israel a tomar cualquier decisión con el fin de garantizar el libre acceso a los lugares sagrados, mientras defiende la seguridad y el orden público”, dijo el comunicado, sin dar más detalles.
Las oraciones del viernes en el día santo musulmán son el período más activo de la semana en el Monte del Templo y se espera que lleguen decenas de miles de personas al recinto.
El grupo terrorista árabe Hamás llamó el viernes a protestas masivas contra las medidas de seguridad, las cuales Israel dijo que eran necesarias debido al ataque terrorista del viernes pasado.
Los clérigos islámicos también han estado instando a los musulmanes a saltarse las oraciones en las mezquitas de barrio el viernes y converger en el Monte del Templo, en un intento de atraer a más gente. A los musulmanes se les ha pedido esta semana que oren en las calles en lugar de someterse a los nuevos procedimientos de seguridad.
“Más de 3.000 policías serán desplegados en y alrededor de la zona de la Ciudad Vieja, el Monte del Templo y vecindarios cercanos”, dijo el jueves el portavoz policial Micky Rosenfeld. También se dice que la policía planea limitar el número de musulmanes que pueden entrar al área del Monte del Temploy bloquear la entrada a la capital de otras áreas del país antes de las oraciones del viernes.
Además de la presencia policial fuertemente reforzada, el ejército anunció que se pondrían a disposición cinco batallones para hacer frente a la violencia en los alrededores de la capital.
Las Fuerzas de Defensa de Israel también cancelaron todas las licencias durante el fin de semana, manteniendo todas las unidades en plena fuerza en previsión de la violencia.
Los disturbios y agresiones contra la policía israelí en la Ciudad Vieja de Jerusalén comenzaron el jueves, después de que miles de musulmanes se reunieron en torno al lugar sagrado del Monte del Templo para oraciones vespertinas.
Los musulmanes, como suelen proceder, atacaron arrojando rocas y botellas de vidrio a los oficiales de la Puerta de los Leones de la Ciudad Vieja después de las oraciones de la noche. La policía respondió con gases lacrimógenos y métodos de dispersión de disturbios, dijo la policía. Más de 40 árabes y cinco oficiales israelíes fueron reportados como heridos.
Israel inicialmente cerró el sitio, denominado por los colonos musulmanes como el Noble Santuario y por los judíos como el Monte del Templo después del ataque del viernes pasado.
El miércoles, fuentes árabes e israelíes dijeron que un compromiso negociado por Estados Unidos podría podría incluir la remoción de los detectores de metales del lugar, como exigían los clérigos jordanos y palestinos. En su lugar, la policía utilizaría varas de detección de metales de mano (similares a las empleadas por los guardias de seguridad en los centros comerciales israelíes), pero solo en aquellas personas consideradas sospechosas.
El aumento de las medidas de seguridad se tomó después de que se comprobó que los tres asesinos musulmanes que salieron armados del complejo y dispararon contra la policía el viernes habían escondido sus armas en el sitio supuestamente sagrado para ellos.
El jueves, la policía publicó imágenes de vídeo mostrando cómo los asesinos y un cómplice obtuvieron las armas en el complejo del Monte del Templo.