La primera tormenta del invierno también dejó su marca en el cementerio Har Hamenuchot en Jerusalén. La enorme cantidad de lluvia que cayó en poco tiempo llevó al colapso de un pequeño muro de contención en una de las laderas de la montaña.
Además, las lluvias causaron un derrumbe de piedras y tierra en varios terrenos de la montaña.
Bajo la dirección del alcalde de Jerusalén, el director del Consejo de Cementerios, Rabino Tzuriel Krispel, llegó hoy y puso al corriente a los funcionarios del municipio de Jerusalén de la situación en la montaña.
Los trabajadores han llevado a cabo los primeros trabajos de restauración de la pared y en los próximos días se espera que se reconstruya de manera ordenada. Al mismo tiempo, el director de la parte occidental de la ciudad, Sasson Shavu, y los empleados municipales llegaron para limpiar las piedras y la suciedad que barrieron varias secciones de la montaña después de las lluvias.
En el último año se ha producido una revolución en la infraestructura de las carreteras que ascienden a Har Hamenuchot, que se está llevando a cabo en colaboración con el alcalde de Jerusalén, Moshe Leon, el director de la División de Edificios Religiosos del Municipio de Jerusalén, Rabino Yitzhak Hanau, y el director general del Consejo del Cementerio, Rabino Tzuriel Krispel.
La visión que subyace a esta actividad es hacer más accesibles las carreteras y el entorno montañoso, mediante la pavimentación de una nueva carretera de acceso a un costo de millones de shekels, la mejora de los aparcamientos y las aceras y la construcción de cobertizos en beneficio de las familias que celebran ceremonias conmemorativas en la montaña y otros proyectos destinados a mejorar significativamente el acceso.
El director del Departamento de Asuntos Religiosos del Municipio de Jerusalén, Rabino Itzjak Hanau, dijo: “Invertimos todos los recursos para preservar el honor de los difuntos y la infraestructura en la montaña tanto en invierno como en verano, para que el pueblo de Israel pueda ascender y rezar sobre las tumbas de los justos y sus seres queridos”.
El director general del Consejo del Cementerio, Rabino Tzuriel Krispel, concluyó: “Tenemos el privilegio de mejorar los caminos hacia Har Hamenujot y de asegurar un ascenso ordenado y accesible para todos a las tumbas de los justos y sus seres queridos enterrados en la montaña. Realizaremos un estudio en profundidad para localizar todos los lugares donde, Dios no lo quiera, puedan darse casos similares y evitaremos esto en el futuro”.