Durante una visita a una sinagoga en Belfast, el primer ministro británico, Boris Johnson, prometió solucionar las complicaciones burocráticas relacionadas con el Brexit que han provocado la escasez de alimentos kosher en Irlanda del Norte.
No hay necesidad de “controles laboriosos sobre los productos singularmente importantes para la comunidad judía que se trasladan de Gran Bretaña a Irlanda del Norte”, dijo Johnson el lunes. “Veremos cómo se resuelve esta situación”.
Irlanda del Norte ha permanecido en el mercado único de la Unión Europea a pesar de que el Reino Unido, del que forma parte Irlanda del Norte, se retiró del bloque en 2020. Este hecho ha complicado los envíos de alimentos y otros productos del Reino Unido a Irlanda del Norte, lo que ha provocado la escasez de alimentos kosher, entre otros problemas.
La comunidad judía de Manchester, en Inglaterra, es la principal proveedora de alimentos kosher para la Sinagoga de la Comunidad Judía de Belfast, que atiende a esa comunidad de unos pocos cientos de personas.
En su visita a Belfast, Johnson se reunió con políticos locales a raíz de las elecciones del 5 de mayo al parlamento de Irlanda del Norte, uno de los cuatro países constituyentes que conforman el Reino Unido, junto con Escocia, Gales e Inglaterra. Johnson está tratando de facilitar la formación de una coalición de gobierno de partidos con agendas significativamente diferentes, incluyendo puntos de vista diversos sobre el Brexit.