La tradicional Bendición Sacerdotal congregó a decenas de miles de judíos frente al Muro Occidental o Kotel Hamarabí” (conocido en el mundo gentil como el Muro de las Lamentos), en la ciudad amurallada de Jerusalén, para rezar y recibir el asentimiento de la casta de sacerdotes con motivo de la celebración del Sucot.
El embajador de EEUU en Israel, David Friedman, fue uno de los participantes a la masiva bendición que se produce dos veces al año, en Sucot y la Pascua judía (Pesaj), junto al principal vestigio del Segundo Templo de Jerusalén, el lugar más sagrado para el judaísmo, denominado Monte del Templo.
Solo los judíos descendientes varones del bíblico Aaron, hermano de Moisés, en su gran mayoría con apellido Cohen (sacerdote) pueden bendecir al pueblo y así lo hacen en este día denominado Birkat Kohanim (bendición de los Cohanim), en medio de la festividad del Sucot que comenzó el pasado miércoles al atardecer y dura una semana.
Dada la gran afluencia de gente al Muro de Occidental, situado en Jerusalén, la Policía reforzó las medidas de seguridad tanto dentro como en los alrededores de la Ciudad Vieja.
“Unidades policiales, policías de frontera y patrullas asegurando el evento. Las medidas generales de seguridad continúan durante esta semana por la festividad del Sucot, con énfasis en las áreas públicas en todo el país, como parques y centros comerciales”, declaró el portavoz policial Micky Rosenfel.
También conocida como Fiesta de los Tabernáculos, durante una semana los israelíes celebran en modestas cabañas (suca en hebreo) levantadas en jardines, terrazas y veredas donde las familias comen, beben y rezan.
Su conmemoración aparece recogida en el libro del Levítico: “Viviréis en cabañas siete días… para que vuestras generaciones sepan que hice habitar a los hijos de Israel en tiendas cuando los liberé de la tierra de Egipto”.