Luiz Fux, el primer juez judío del más alto tribunal de Brasil, utilizó una expresión hebrea que significa “bendito sea Dios” para cerrar su ceremonia de juramento como primer presidente judío del tribunal.
“Que la humildad, el coraje, la independencia, la prudencia y la disciplina guíen el camino que ahora comienzo”, dijo Fux el jueves al final de su discurso en Brasilia. “Que Dios me proteja. Baruj Hashem.”
El nativo de Río es nieto de refugiados rumanos que huyeron a Brasil durante la Segunda Guerra Mundial. Su abuela es una ex presidenta del Hogar de Niños Israelitas de Río. En 2014, Fux fue el orador principal en la convención anual de la Confederación Israelita Brasileña, la organización judía del país.
“Fux es un orgulloso observador del judaísmo. Su serenidad, competencia y honestidad serán importantes a la hora de elegir las directrices del tribunal y de dirigir las sesiones”, dijo Arnon Velmovitsky, presidente de la federación judía de Río, a la Agencia Telegráfica Judía.
Brasil rota la presidencia entre los 11 jueces del Tribunal Supremo Federal cada dos años.
“Este es un momento muy especial y significativo para la comunidad judía brasileña, que comprende alrededor del 0,2 por ciento de la población nacional”, dijo la jueza Denise Levy Tredler, del Tribunal de Justicia del Estado de Río.
Fux fue nominado al tribunal en 2011 por la ex presidenta Dilma Rousseff. El tribunal decide sobre asuntos constitucionales y otros asuntos, así como sobre apelaciones finales.
Fux es un ex juez del Tribunal Superior de Justicia y presidió una comisión que forjó el nuevo Código de Proceso Civil de Brasil. También es escritor y profesor.