El Gran Rabino del Reino Unido, Sir Ephraim Mirvis, ha manifestado su desacuerdo con la reciente decisión del gobierno británico de suspender 30 de las 350 licencias de exportación de armas a Israel.
En una declaración publicada en X, Mirvis calificó de “increíble” que se tome esta decisión “en un momento en que Israel está librando una guerra por su supervivencia en siete frentes, desde el 7 de octubre”. Además, destacó que la suspensión se produce mientras las familias enterraban a seis rehenes asesinados por “crueles terroristas”.
Mirvis alertó que esta medida podría “alentar” a los enemigos de Israel y de “Occidente democrático”, y sostuvo que refuerza “la falsedad de que Israel viola el derecho internacional humanitario, cuando en realidad está haciendo esfuerzos extraordinarios por defenderlo”.
Añadió que, en lugar de esta suspensión, “Gran Bretaña e Israel tienen mucho que ganar si se unen para luchar contra nuestros enemigos comunes en pos de un mundo más seguro”.
El gobierno británico anunció el lunes la suspensión de decenas de licencias de exportación de armas ante el riesgo de que el material pudiera ser usado para violar el derecho internacional humanitario. A diferencia de Estados Unidos, Reino Unido no entrega armas directamente a Israel, sino que autoriza a empresas privadas para que lo hagan, previo análisis legal para garantizar el cumplimiento del derecho internacional.
Las licencias suspendidas corresponden a componentes de sistemas aéreos como aviones de combate, helicópteros y drones, aunque no afectan al programa F-35, que involucra la colaboración de varios países para la producción y distribución de partes.
El Reino Unido podría reconsiderar su decisión en el futuro si se reduce el riesgo de violaciones.
El ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, expresó su “profunda decepción” ante el anuncio del ministro británico de Asuntos Exteriores, David Lammy, sobre la suspensión de las licencias. Gallant subrayó que esta medida se toma en un momento crucial, mientras Israel enfrenta amenazas en múltiples frentes contra Hamás, calificada como una organización terrorista.
Gallant también mencionó la reciente ejecución de seis rehenes israelíes por parte de Hamás en Gaza y destacó los esfuerzos en curso para liberar a otros 101 rehenes. En su declaración en X, Gallant afirmó su apoyo a las fuerzas de seguridad israelíes, elogiando su “coraje, profesionalismo y valores morales” en la defensa de Israel.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores de Israel, Israel Katz, también expresó su decepción ante la decisión británica, calificándola de “mensaje muy problemático” hacia Hamás y sus aliados en Irán.
David Lammy, el ministro británico de Asuntos Exteriores, explicó en el Parlamento que esta medida no constituye un embargo completo, sino una revisión de las licencias de exportación a raíz de la guerra en curso. Se espera que en los próximos días se den a conocer más detalles sobre esta decisión, tomada tras el descubrimiento de seis rehenes israelíes muertos en un túnel en Rafah.