Se espera que miles de judíos visiten el Monte del Templo el jueves, Tisha B’Av, que es uno de los días principales para las visitas judías al lugar más sagrado del judaísmo.
Uno de los primeros visitantes del día fue el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, que quiso enviar un mensaje de unidad: “En este día, en este lugar, es importante recordar siempre que todos somos hermanos. De derechas, de izquierdas, religiosos, laicos. Todos somos la misma nación. Y cuando un terrorista mira por la ventana, no distingue entre nosotros. La unidad es importante, el amor es importante. Este lugar, este lugar es el más importante para el pueblo de Israel, tenemos que volver y mostrar nuestro gobierno”.
El ministro de Desarrollo de la Periferia, el Néguev y Galilea, Yitzhak Wasserlauf, también visitó el Monte del Templo el jueves.
La policía se reunió en masa para garantizar la seguridad y rapidez de las visitas.
Se instalaron toldos en la zona de espera, recientemente renovada, para proteger del sol a los visitantes del lugar. La Administración del Monte del Templo sugiere a los visitantes que lleguen después de las 9 de la mañana debido a la aglomeración prevista durante las dos primeras horas de apertura del lugar.
Aproximadamente 15 judíos fueron detenidos esta mañana en el Monte del Templo después de que se postraran en el suelo por respeto al lugar sagrado.
Miles de judíos visitaron el Monte del Templo durante las Tres Semanas, periodo de luto por la destrucción de los Santos Templos y la antigua ciudad de Jerusalén.
Al principio de la semana, estudiantes y profesores de la yeshiva Har Etzion ascendieron al Monte del Templo dirigidos por el Rosh Yeshiva Rabino Yaakov Medan y el Rabino Eitan Kliman, bajo la dirección del Rabino Yitzchak Levy.
El miércoles, estudiantes y profesores de la Yeshiva Otniel ascendieron al Monte del Templo bajo la dirección del Rosh Yeshiva Rabino Re’em HaKohen.
El rabino Shimshon Elbaum, jefe de la Administración del Monte del Templo, dijo: “Estamos viendo un gran aumento del deseo y la dedicación al lugar, la pena y el dolor ya se canalizan en grandes acciones en el lugar sagrado. Es emocionante ver a los miles de personas que visitan el Monte del Templo en pureza según las normas de la Halajá”.