El sábado, unos días después de otro ataque aéreo, miembros de un grupo disidente iraní de extrema izquierda fueron asesinados en las montañas del Kurdistán en el norte de Irak. Los ataques parecen representar un aumento en el uso de drones y ataques aéreos de Ankara contra grupos kurdos. Ankara afirma que estos grupos, vinculados al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) son “terroristas”, pero no presenta pruebas de que alguno de ellos esté involucrado en el tema del “ terrorismo”.
En un reciente post en línea el Partido de la Vida Libre de Kurdistán (PJAK), que es un grupo disidente iraní vinculado al PKK, dijo que dos de sus combatientes habían muerto en ataques aéreos el 26 de mayo. También murieron otros tres partidarios del grupo. Los dos jóvenes fueron asesinados al norte de Sulimaniya, cerca de la frontera iraní.
La Fuerza Aérea de Turquía suele operar en el norte del Irak. En los últimos meses ha llevado a cabo ataques aéreos sobre un campamento de refugiados kurdos cerca de Makhmour y ha atacado las zonas yazidi cerca de Sinjar, la zona del genocidio de ISIS contra la minoría yazidi. Turquía afirma que está “neutralizando” a los terroristas. Irak se ha quejado a Ankara de los ataques aéreos, pero Ankara actúa con impunidad y las organizaciones internacionales que suelen vigilar los derechos humanos se niegan a criticar a Turquía o a visitar las zonas de los ataques con drones.
El ataque con drones contra los miembros del PJAK mató a Zinar Brusik y Rebaz Sina, según informaron los medios de comunicación de Rudaw. Días después otro ataque aéreo turco asesinó a dos civiles cerca de la ciudad de Deraluk. Esta zona de pintorescas montañas es frecuentada por kurdos que visitan la antigua ciudad montañosa de Amedi. Se dice que uno de los muertos en el ataque aéreo era un Peshmerga o soldado kurdo retirado.
Asimismo, el jueves, los guardias fronterizos iraníes también mataron a tiros a dos trabajadores kurdos cerca de la ciudad de Khoy, en la frontera entre la provincia de Azerbaiyán occidental del Irán y el norte de Irak. Los hombres eran “kolbars” o porteadores que transportan mercancías a través de la frontera. Muchos trabajan de manera indocumentada como contrabandistas y el régimen iraní les dispara habitualmente.
En la región kurda del norte de Irak, la imposibilidad de que Irak controle su propio espacio aéreo y la impunidad que la comunidad internacional atribuye a Turquía para llevar a cabo ataques con drones y a Irán para abatir a tiros a las personas en la frontera han provocado numerosas muertes en los últimos meses.
El ataque aéreo de Turquía contra el PJAK es inusual, pero Turquía ha tratado de colaborar más estrechamente con el régimen iraní contra el PKK y los grupos vinculados a éste. La decisión de Ankara de ampliar sus bases en Irak y los ataques aéreos pueden estar vinculados no solo a su intento de exterminar al PKK en el extranjero, sino también a los ataques contra filiales del PKK vinculadas a Irán. Puede estar compartiendo inteligencia con el Irán para lograr esto. El año pasado Turquía invadió el este de Siria, atacando a las Fuerzas Democráticas Sirias, que también alega que está vinculada al PKK.