BAGDAD (AP) – Al menos tres cohetes impactaron en la Zona Verde fortificada de Bagdad cerca de la embajada de Estados Unidos el martes, un día después de un ataque a una base de entrenamiento al sur de Bagdad donde estaban presentes las tropas de la coalición lideradas por EE.UU. y entrenadores de la OTAN, dijeron oficiales de seguridad iraquíes. Fue el cuarto ataque de este tipo en el lapso de una semana.
Al menos tres cohetes impactaron en la Zona Verde, sede del gobierno iraquí y hogar de varias embajadas extranjeras, dijeron dos oficiales de seguridad iraquíes. Myles Caggins, portavoz de la coalición, dijo que los cohetes cayeron al menos a 2 kilómetros de la embajada.
No hubo informes inmediatos de bajas.
La noche anterior, los cohetes alcanzaron la base de Basmaya cerca de la capital iraquí, según un comunicado del ejército iraquí. Los proyectiles aterrizaron en un área que incluye tierra agrícola y una fábrica, según el comunicado. No se dieron más detalles.
Un contingente español de la coalición y entrenadores de la OTAN están presentes en la base de Basmaya. No hubo una confirmación inmediata del ataque de la coalición y ningún grupo militante se atribuyó la responsabilidad del asalto.
El miércoles pasado, un bombardeo de más de dos docenas de cohetes golpeó el campamento Taji, al norte de Bagdad, matando a tres militares de la coalición, incluyendo dos estadounidenses. Un militar británico también fue asesinado. Fue el más mortífero ataque a las tropas estadounidenses en Irak desde un ataque con cohetes a finales de diciembre en una base iraquí, que mató a un contratista estadounidense y puso en marcha una serie de ataques que llevaron a Irak al borde de la guerra.
El bombardeo del miércoles fue seguido por otro ataque, el sábado en el mismo lugar, que hirió a cinco soldados, tres miembros de la coalición y dos soldados iraquíes.
El primer ataque provocó el viernes ataques aéreos americanos contra lo que los funcionarios de Estados Unidos dijeron que eran principalmente instalaciones de armas pertenecientes a Kataib Hezbolá, el grupo de milicia apoyado por Irán que se cree que es responsable del ataque.
Sin embargo, los militares iraquíes dijeron que esos ataques aéreos mataron a cinco miembros de las fuerzas de seguridad y a un civil, e hirieron a cinco combatientes de las Fuerzas de Movilización Popular (FMP), una organización que incluye una serie de milicias, entre ellas algunos grupos apoyados por Irán.
Los grupos de milicias chiítas apoyados por el Irán juraron vengarse, lo que indica otro ciclo de violencia entre Washington y Teherán que podría tener lugar en Irak.