El derrocado presidente afgano Ashraf Ghani reside en los Emiratos Árabes Unidos, según confirmó el miércoles el Ministerio de Asuntos Exteriores del Estado del Golfo Pérsico.
El paradero de Ghani había sido objeto de considerables especulaciones en los días transcurridos desde que huyó de Afganistán el fin de semana, cuando Kabul cayó en manos de los talibanes con una resistencia mínima.
“El Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación Internacional de los Emiratos Árabes Unidos puede confirmar que los Emiratos Árabes Unidos han recibido al presidente Ashraf Ghani y a su familia en el país por razones humanitarias”, dijo en un comunicado.
La toma de posesión de Afganistán por los talibanes ha agitado la política mundial durante días, y ha provocado un intenso escrutinio sobre el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y su decisión de retirar la presencia estadounidense del país.
Biden mantuvo el lunes su decisión, a pesar del caos que se ha desatado tras la toma de control de Kabul por parte de los talibanes. Biden ha arremetido contra Ghani y las fuerzas de seguridad afganas por no enfrentarse a los talibanes tras dos décadas de asistencia y entrenamiento por parte de Estados Unidos.
“Les dimos todas las herramientas que podían necesitar”, dijo el lunes desde la Casa Blanca. “Les dimos todas las oportunidades para determinar su propio futuro. [Lo que] no pudimos proporcionarles fue la voluntad de luchar por ese futuro”.
Varios informes han indicado que Ghani escapó del país con una pequeña fortuna en efectivo.
La rápida caída del gobierno afgano respaldado por Estados Unidos ha hecho que miles de personas intenten huir del país. Sin embargo, estos intentos se han visto obstaculizados por los puestos de control de los talibanes en torno al aeropuerto internacional Hamid Karzai de Kabul, a pesar de las promesas de los dirigentes del grupo militante islámico de que se permitiría la salida a quienes intentaran hacerlo. Estados Unidos ha dicho que está aumentando sus vuelos de evacuación a lo largo de la semana para transportar con seguridad tanto a los afganos como a los estadounidenses que permanecen en la ciudad.
Los talibanes ya se están proyectando como gobernantes legítimos de Afganistán, y sus portavoces celebraron el martes una conferencia de prensa en la que afirmaron que querían unir el país y ofrecer una “amnistía” a quienes se oponen a ellos. Sigue siendo muy dudoso el grado de sinceridad de esas súplicas, dados los recientes informes de violencia y represión continuas y el largo historial de represión violenta de los talibanes.