Los equipos de rescate buscaban el martes a los supervivientes de un fuerte terremoto en una remota región occidental de Afganistán que causó la muerte de al menos 22 personas y daños “masivos” en los edificios, según las autoridades.
El terremoto de 5,3 grados de magnitud que se produjo el lunes por la tarde sacudió el distrito de Qadis, en la provincia de Badghis, una zona rural de difícil acceso por carretera.
“El terremoto causó daños masivos en las casas, entre 700 y 1.000 han sido dañadas”, dijo el portavoz provincial de Badghis, Baz Mohammad Sarwary, en un mensaje de vídeo.
Afganistán se encuentra ya sumido en una catástrofe humanitaria, agravada por la toma del país por parte de los talibanes en agosto, cuando los países occidentales congelaron la ayuda internacional y el acceso a los activos que tenían en el extranjero.
Sarwary dijo que 22 personas murieron y cuatro resultaron heridas, revisando el número de muertos de la cifra anterior de 26 que dio a la AFP a última hora del lunes.
“Existe la posibilidad de que las víctimas aumenten”, dijo en su último mensaje de vídeo.
El portavoz del gobierno talibán, Zabihullah Mujahid, confirmó la cifra.
Las imágenes que circulaban por las redes sociales mostraban a residentes, incluidos niños, buscando entre los escombros de las casas derrumbadas.
Funcionarios del gobierno dijeron que los trabajadores de rescate estaban ayudando a buscar supervivientes y a trasladar a los heridos a los hospitales locales.
Un equipo de talibanes se encontraba en la zona ayudando en las tareas de socorro.
Mujahid dijo que todos los organismos gubernamentales habían recibido instrucciones para proporcionar alimentos, ayuda médica y refugio a los afectados.
“También pedimos a las agencias de ayuda internacional y a los organismos humanitarios que ayuden a las víctimas del desastre”, dijo en un comunicado publicado en Twitter.
El epicentro del terremoto fue cerca de la ciudad de Qala-i-Naw, capital de Badghis, a menos de 100 kilómetros de la frontera con Turkmenistán, según el Servicio Geológico de Estados Unidos.
Naciones Unidas ha dicho que necesita 5.000 millones de dólares en 2022 para evitar la actual catástrofe humanitaria en Afganistán.
Una devastadora sequía ha agravado la crisis, siendo Qadis, afectada por el terremoto, una de las zonas más afectadas.
Afganistán sufre con frecuencia terremotos, especialmente en la cordillera del Hindu Kush, situada cerca de la unión de las placas tectónicas euroasiática e india.
Incluso los terremotos más débiles pueden causar daños importantes en las casas y edificios mal construidos del empobrecido país.
En 2015, más de 380 personas murieron en Pakistán y Afganistán cuando un potente terremoto de 7,5 grados de magnitud arrasó los dos países, con la mayor parte de las muertes en Pakistán.
En esa catástrofe, 12 niñas afganas murieron aplastadas en una estampida cuando intentaban huir del edificio de su escuela, que estaba temblando.