En las últimas semanas, Irán se ha centrado en sus avances en la adhesión a la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS).
El ministro de Asuntos Exteriores iraní, Hossein Amirabdollahian, elogió la decisión de Irán de avanzar en un proyecto de ley de adhesión a la OCS, señalando que la reciente votación del proyecto de ley de adhesión de la República Islámica de Irán a la OCS “muestra la determinación y la seriedad de nuestro país para desarrollar la cooperación regional, internacional y económica y fortalecer su visión de Asia”.
La OCS incluye países de Asia Central, como Kazajistán, Tayikistán, Rusia, Pakistán, Uzbekistán y China. Se trata de países importantes porque Rusia y China tienden a posicionarse en contra de Estados Unidos. Esto es cada vez más cierto en el caso de Rusia tras la invasión de Ucrania. Rusia y Occidente parecen haber destruido por completo sus relaciones, y a Irán le gustaría entrar en escena y beneficiarse.
Irán llama a esto “multilateralismo”. Recientemente, en una entrevista con el periódico chino People’s Daily Online publicada el sábado, Mohammad Keshavarzzadeh declaró que “la OCS pretende ayudar a dar mejores respuestas a los problemas a los que se enfrentan los Estados miembros, así como la región”.
Sostuvo que era muy “significativo que Irán se uniera al bloque, señalando que la organización incluye miembros de Asia Central y Oriental, además de otras regiones, y esto puede dar a Irán una plataforma para hacer acercamientos con todos estos países”.
La razón por la que a Irán le gusta la OCS es que la considera una organización que no tiene miembros occidentales. “Sobre la cuestión de que algunas naciones occidentales equiparan la OCS con la OTAN, Keshavarzzadeh dijo que tal comparación es errónea porque la OCS es un bloque inclusivo y no una alianza militar”, señaló un informe del Tehran Times. Se trata de publicaciones favorables al régimen y reflejan la postura de Irán.
¿Cómo beneficiará a Irán su adhesión a la OCS?
Un artículo de la Fundación Carnegie para la Paz Internacional señala que la adhesión de Irán a la OCS aportará algunos beneficios a Teherán, pero también hay obstáculos.
“Los funcionarios iraníes siguen manteniendo que la adhesión oficial a la OCS -que está prevista para abril de 2023- traerá beneficios en los sectores económico, comercial y estratégico. Además, desde la perspectiva de la propia OCS, la cooperación política de Irán puede ser útil para las relaciones de la organización con el mundo islámico”, señala el informe.
También señala que el comercio entre Irán y los países de la OCS superó los 651.000 millones de dólares el año pasado. Pero Irán tendrá que modernizar sus infraestructuras para aprovechar las nuevas oportunidades. Además, la nueva asociación entre China e Irán tardará en materializarse en términos de beneficios para Teherán.