El principal partido de la oposición chipriota ha criticado al gobierno por haber acogido los ejercicios militares de las Fuerzas de Defensa de Israel que acaban de concluir, calificándolos como “un acontecimiento peligroso para Chipre”.
Las Fuerzas de Defensa de Israel concluyeron el jueves un importante ejercicio militar en Chipre, simulando una ofensiva militar terrestre en el interior del Líbano en una posible guerra contra el grupo terrorista Hezbolá, respaldado por Irán.
La isla mediterránea fue elegida tanto por su terreno -montañoso a lo largo de una llanura costera, como el Líbano- como por su proximidad a Israel. El simulacro simuló varias dificultades en un asalto terrestre, como el suministro de alimentos, agua y municiones; problemas de comunicación; y las complicaciones generales de operar en un territorio desconocido.
Sin embargo, el principal partido comunista de la oposición, Akel, dijo el jueves que la medida socavaba la seguridad de Chipre y comparó a las FDI con el ejército turco que ocupa la mitad norte de la isla dividida.
“Los territorios y las ciudades de nuestro país no pueden convertirse en campos de entrenamiento para ningún ejército extranjero”, dijo Akel, según el Cyprus Mail.
“Además, Chipre debe evitar cooperar con un ejército extranjero con un historial de ocupación, colonización, crímenes de guerra y violación de las leyes internacionales, todo lo cual nos recuerda la ocupación turca en la isla”, dijo el partido.
Akel tiene un largo historial de políticas anti Israel y fue el único partido que votó en contra del acuerdo de seguridad entre Chipre e Israel firmado en 2020.
Aparte de Akel, el Cyprus Mail también informó de que había habido importantes quejas de los residentes locales por el ruido producido por los vehículos militares y el fuego de artillería.
En los últimos años, Israel, Chipre y Grecia han formado una alianza cada vez más estrecha destinada a contrarrestar a Turquía como rival estratégico en el mar Mediterráneo.
Chipre no participó directamente en el ejercicio. Sin embargo, el ministro de Defensa, Benny Gantz, y el jefe de las FDI, Aviv Kochavi, saludaron la “alianza estratégica” entre los países durante el ejercicio.
Las FDI consideran que la región del Mediterráneo Oriental es una zona de gran interés para mantener la estabilidad de la seguridad, en la que la “cooperación estratégica” con los socios -como Chipre y Grecia- es de gran importancia, dijeron los funcionarios.
También durante la última semana del gran ejercicio de un mes de duración -denominado Carros de Fuego-, las Fuerzas Aéreas simularon ataques aéreos contra instalaciones nucleares iraníes, sobre el Mar Mediterráneo.
El simulacro Carros de Fuego fue el mayor ejercicio militar en décadas.
Abordó la posibilidad de que se produzcan acontecimientos repentinos en varios escenarios al mismo tiempo, centrándose en la lucha contra Hezbolá, apoyada por Irán, en el Líbano.