El Líbano hizo un llamamiento a los Estados más amigos el sábado para que le ayuden a importar bienes esenciales en su lucha contra la aguda crisis económica y la escasez de divisas, dijo la oficina del primer ministro interino Saad Hariri, según informa Reuters.
Hariri escribió el sábado a los líderes de Alemania, Reino Unido y España para solicitar ayuda para asegurar el crédito para las importaciones, después de haber hecho el mismo llamamiento el viernes a Arabia Saudita, Francia, Rusia, Turquía, Estados Unidos, China y Egipto.
Las cartas formaban parte de los esfuerzos para “hacer frente a la escasez de liquidez y asegurar las necesidades básicas de importación de los ciudadanos… para garantizar la seguridad alimentaria y las materias primas para la producción”, dijo su oficina.
La crisis económica del Líbano, la peor desde su guerra civil de 1975-90, se ha convertido en una crisis financiera desde el estallido de las protestas contra la élite gobernante en octubre.
La crisis económica tiene sus raíces en décadas de corrupción y despilfarro que han hecho del Líbano uno de los Estados más endeudados del mundo.
Hariri, que dirige un gobierno provisional, renunció como primer ministro el 29 de octubre, motivado por las protestas contra la corrupción.
El consenso surgió esta semana en torno al empresario Samir Khatib como el nuevo primer ministro y se espera que sea designado el lunes a menos que la volátil política del Líbano traiga sorpresas antes de esa fecha.
El sistema sectario del Líbano exige que el primer ministro sea un musulmán sunita. El presidente del Parlamento, Nabih Berri, el principal musulmán chiíta del Estado, dijo que nombraría a Khatib.
“En un principio iba a nombrar al primer ministro Saad Hariri o a la persona que él respalda para formar el gobierno, y dado que apoya al ingeniero Samir Khatib, nombraré a Samir Khatib”, dijo al periódico al-Joumhouria.