El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, viajará a Medio Oriente la próxima semana en un esfuerzo por apuntalar el apoyo de los aliados árabes de Estados Unidos.
El Departamento de Estado dijo que Pompeo visitará ocho países de la región, comenzando por Jordania y terminando en Kuwait pero saltándose Israel, con cuyo líder se reunió esta semana.
Será el primer viaje de Pompeo a Medio Oriente desde el reciente anuncio del presidente Donald Trump de que pretende retirar las fuerzas estadounidenses de Siria. Esa decisión, que llevó a Jim Mattis a dimitir como secretario de defensa, así como se espera que la línea dura de la administración Trump sobre Irán domine la agenda de Pompeo.
Además de Jordania y Kuwait, Pompeo planea detenerse en Egipto, Bahrein, los Emiratos Árabes Unidos, Qatar, Arabia Saudita y Omán.
Pompeo no tiene previsto visitar Israel en este viaje, pero sostuvo conversaciones con el primer ministro Benjamin Netanyahu el martes en Brasil, donde los dos asistían a la toma de posesión del presidente Jair Bolsonaro.
Además, el Asesor de Seguridad Nacional de Trump, John Bolton, partirá a Israel y Turquía en los próximos días para discutir el retiro de Siria y sus implicaciones.
Pompeo dijo el jueves que el gobierno de Trump ha ayudado a facilitar la cooperación entre Israel y varios países árabes con los que no tiene vínculos diplomáticos.
En una entrevista con Sean Hannity, de Fox News, a Pompeo se le preguntó si la alianza no oficial contra Irán entre los Estados Unidos, Israel, Arabia Saudita, los Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Jordania podría conducir a un importante avance de paz.
“Indudablemente. Hemos establecido las condiciones en el Medio Oriente donde estos países ahora están trabajando juntos en múltiples frentes”, dijo Pompeo.
Pompeo no especificó la naturaleza de esta cooperación, pero Netanyahu ha saludado el desarrollo de lazos clandestinos con Estados árabes no identificados y señaló su hostilidad compartida hacia Irán.
Los únicos países árabes con los que Israel tiene actualmente relaciones formales son Egipto y Jordania, aunque Netanyahu visitó el sultanato del Golfo de Omán el año pasado y dijo que se estaban preparando nuevas aperturas diplomáticas.
Los informes de los últimos años han indicado el establecimiento de estrechos lazos de seguridad entre Israel, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos, que, como Jerusalén, consideran a Irán como su principal enemigo en el Medio Oriente.
En la entrevista, Pompeo también abordó el abrupto anuncio de Trump el mes pasado de que retiraría a todas las tropas estadounidenses de Siria, una medida que ha despertado la preocupación en Israel de un Irán envalentonado.
“Aún podremos contrarrestar eficazmente, con esos socios, la amenaza de ISIS en la región y lo haremos sin esos 2,000 soldados en el terreno”, dijo, usando un acrónimo para el Estado Islámico y sin mencionar la presencia de Irán en Siria.
“No hemos cambiado nuestra política de continuar asegurándonos de que no haya un resurgimiento de ISIS y lo vamos a hacer de una manera más inteligente y mejor, y podemos hacerlo por las alianzas que el Presidente Trump ha establecido”, gregó Pompeo.
Al abordar su decisión de retirar a los soldados estadounidenses de Siria, Trump dijo el miércoles que Irán “puede hacer lo que quiera” en Siria y que está reduciendo su presencia allí en medio de las nuevas sanciones de Estados Unidos.
Tras estos comentarios, Netanyahu pintó el jueves una imagen de la estrecha cooperación israelí-estadounidense en un esfuerzo por obstaculizar la ambición nuclear y regional de Irán.
“El presidente Trump está actuando contra Irán a nivel económico, y aquí en Israel estamos actuando contra Irán a nivel militar”, dijo.
Netanyahu ha advertido repetidamente en los últimos años que Irán está tratando de establecer una presencia militar en Siria, donde está luchando junto a su representante libanés Hezbolá, y Rusia para restaurar el régimen del presidente sirio Bashar al-Assad.
Los funcionarios israelíes también advirtieron que la ausencia de Estados Unidos abriría las puertas a Teherán para crear el llamado “puente terrestre” desde Irán, a través de Irak y Siria, al Líbano y al Mar Mediterráneo.
En los últimos años, Israel ha llevado a cabo cientos de ataques aéreos contra Siria contra objetivos vinculados a Irán.