Sudán ha revocado la ciudadanía del ex líder de Hamás Khaled Mashaal y de otros 3.000 ciudadanos extranjeros, según informaron el miércoles fuentes de los medios de comunicación árabes.
La medida se produce después de que Estados Unidos retirara formalmente a Sudán de una lista negra de Estados patrocinadores del terrorismo el lunes, menos de dos meses después de que el país africano, según se informa, acordara normalizar las relaciones con Israel.
Las autoridades transitorias de Sudán, en funciones desde mediados de 2019 tras una revolución que derrocó al dictador Omar al-Bashir del poder durante mucho tiempo, acogieron con satisfacción esta decisión que debería poner fin a casi tres décadas de aislamiento y suscitar esperanzas de mejores condiciones económicas.

El 23 de octubre, el Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, anunció su decisión de retirar al Sudán de la lista de Estados que apoyan el terrorismo después de que Jartum, según se informa, aceptara normalizar las relaciones con Israel.
Los Estados Unidos impusieron las sanciones en 1993 después de acusar a Omar al-Bashir de tener relaciones con «organizaciones terroristas», en particular la red Al-Qaeda, cuyo líder Osama bin Laden buscó refugio.
Mashaal, de 64 años, renunció a su cargo de jefe de Hamás en 2017 y ha vivido en el exilio durante más de tres decenios en numerosos Estados árabes, entre ellos Jordania y Siria, por temor a ser asesinado por Israel.
A finales de 2019 se informó de que estaba considerando un regreso político. Se dijo que la propuesta contaba con el apoyo de Qatar, donde reside, y Turquía, que ofrece a los altos funcionarios de Hamás un refugio seguro en Estambul.