Unos 60,000 israelíes acudieron a las reservas naturales y los campos a lo largo de las comunidades fronterizas de Gaza el sábado, para celebrar la floración anual de las flores rojas anémonas (kalaniyot), un evento de un mes de especial emoción para los locales y visitantes, después de meses en los que los campos fueron carbonizados por los globos incendiarios lanzados desde el enclave costero controlado por Hamás.
El viernes y el sábado marcaron los dos primeros días del Festival Adom Darom que se llevará a cabo todos los fines de semana durante el mes de febrero y el primer fin de semana de marzo.
Los organizadores dijeron que esperaban números similares en los fines de semana posteriores del festival.
Los asistentes al festival se encontraban entre los 150,000 israelíes que recorrieron los parques nacionales de todo el país el sábado, informaron medios hebreos. Los viajeros aprovecharon el clima inusualmente soleado después de semanas de lluvias considerables, que permitieron la explosión de flores rojas en el sur del país.
Además del festival, se registró a un gran número de israelíes que visitaron las reservas naturales de Banias, Nahal Iyyon, Ein Gedi, junto con los parques nacionales de Caesaria y Masada.
Unos 7.000 israelíes también visitaron la estación de esquí en el más frío Monte Hermon en el norte.
En vista de la gran cantidad de viajeros, la policía pidió al público que ejercite la paciencia y siga las instrucciones de los oficiales que dirigen el tráfico en los distintos sitios del país. Las autoridades también advirtieron a los visitantes que avisen de inmediato a la policía si encuentran objetos sospechosos, como cometas o globos, y que no se les acerquen.
Desde marzo, los islamistas palestinos han efectuado intentos masivos y violentos por traspasar la frontera hacia Israel, en una manifestación multitudinaria apodada “Marcha de retorno”, organizadas por Hamás, con la consigna expresa de “entrar a los poblados judíos y arrancar sus corazones de sus cuerpos”.
Los islamistas de Gaza han lanzado cientos de cometas y globos incendiarios a Israel. Según las autoridades israelíes, se quemaron más de 7,000 acres de tierra, lo que causó daños por millones de shekels. Algunos globos llevaban artefactos explosivos improvisados.
Israel ha exigido el fin de la violencia islamista a lo largo de la frontera en cualquier acuerdo de alto el fuego.
Sus organizadores han dicho que tienen como objetivo lograr el “retorno” de los árabes a los que la ONU les ha asignado el estatus eterno y hereditario de refugiados palestinos, así como a sus descendientes a las tierras que ahora son parte de Israel, y presionar al Estado Judío para que levante sus restricciones sobre el movimiento de personas y bienes hacia y desde el enclave costero.
Los funcionarios israelíes sostienen que el regreso de los llamados refugiados palestinos y sus descendientes destruiría el carácter judío de Israel. También sostienen que existen restricciones a los movimientos para evitar que Hamás y otros grupos terroristas introduzcan armas de contrabando en la Franja.
Hamás, que tomó el control de Gaza en 2007 de la Autoridad Palestina dominada por Fatah, es un grupo terrorista que busca destruir a Israel.