El 3 de noviembre, un bombardero B-1 de la base aérea de Ellsworth en Dakota del Sur se sumó a una formación con diez cazas aliados de Estados Unidos, Japón y Corea del Sur en una maniobra de fuerza. Esto ocurrió días después de que Corea del Norte probara un misil balístico intercontinental, mientras que China desplegó aviones militares cerca de Taiwán el mismo día.
Fue la segunda ocasión en el año que las fuerzas aéreas de estos países efectuaron ejercicios conjuntos. Según el Comando Indo-Pacífico de Estados Unidos, estas maniobras “fortalecen la cooperación trilateral, garantizando una respuesta rápida ante desafíos de seguridad en la región”.
El bombardero B-1 fue acompañado por cuatro cazas F-2 de Japón, cuatro F-15K de Corea del Sur y dos F-16 de la Fuerza Aérea de Estados Unidos. Este vuelo, que tuvo lugar cerca de la isla de Jeju, respondió a la reciente prueba del misil de Corea del Norte.
China incrementa actividades militares en Taiwán
El Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur mencionó que el vuelo se realizó al este de Jeju, entre Japón y Corea del Sur, a cientos de millas de China y Taiwán. Aviones de reabastecimiento de combustible volaron cerca de la costa de Tokio, según datos públicos de seguimiento.
INDOPACOM subrayó el compromiso de las tres naciones con una región Indo-Pacífica estable y abierta. El misil balístico intercontinental de Corea del Norte viajó más lejos que nunca, mostrando un avance en su capacidad, lo que ha incrementado las tensiones globales.
El 3 de noviembre, Taiwán informó que China desplegó 35 aviones militares hacia el sur de su territorio. Estas actividades son parte de los preparativos que Beijing lleva a cabo para una posible invasión en 2027.
Estados Unidos despliega poderío aéreo en ejercicio Keen Sword 25 en Japón
Mientras tanto, las fuerzas estadounidenses se mantienen en alerta ante posibles contingencias en un contexto de inestabilidad global. Estados Unidos ha continuado desplegando su fuerza aérea en el Pacífico a través del ejercicio Keen Sword 25, realizado en Japón en las últimas semanas.
Como parte del ejercicio, cazas F-22 de la Fuerza Aérea de Estados Unidos volaron junto a los F-35B del Cuerpo de Marines de los EE. UU. y los F-15J de la Fuerza Aérea de Autodefensa Japonesa. El entrenamiento también incluyó vuelos conjuntos de cazas F-16 estadounidenses y F-2 japoneses.
El ejercicio culminó el 1 de noviembre con una “caminata en elefante” en la base aérea de Misawa, Japón. Participaron aviones F-16 y F-35 de las fuerzas estadounidenses y japonesas, además de un avión de alerta temprana y un dron de la Fuerza Aérea de Autodefensa Japonesa.