Los islamistas Hutí en Yemen han reclamado el lanzamiento de un ataque con misiles contra el portaviones estadounidense de clase Nimitz, USS Dwight D. Eisenhower (CVN-69), en el mar Rojo.
Detalles del ataque con misiles de los rebeldes Hutí en Yemen
Según Newsweek, el portavoz militar Hutí, Yahya Saree, anunció en una transmisión televisiva que el ataque fue una respuesta directa a las operaciones recientes de la coalición en Yemen. Saree afirmó que varios misiles y cohetes alcanzaron su objetivo con precisión. Sin embargo, estas afirmaciones deben tomarse con escepticismo hasta ser verificadas independientemente.
El portavoz Hutí también afirmó que los ataques angloamericanos mataron a 16 personas e hirieron a otras 41, incluyendo civiles. Estos ataques, según Saree, tuvieron como objetivo un puerto, un edificio de radio, el campamento Ghalifa y dos casas. Por su parte, los británicos han declarado que se tomó el mayor cuidado posible para evitar bajas civiles.
THE HIT WAS “ACCURATE & DIRECT.”
— Save Our Citizenships 🔻 (@LetsStopC9) May 31, 2024
Yemeni Armed Forces targeted the advanced US aircraft carrier USS Dwight D. Eisenhower in the Red Sea with cruise and ballistic missiles – in response to the American-British bombardment of Sanaa and Hodeidah. pic.twitter.com/wSMlkXusni
El USS Dwight D. Eisenhower, conocido como Ike, ha estado involucrado en operaciones en el mar Rojo, incluidas acciones contra los Hutíes, desde enero. Según USNI News, en abril Ike derribó misiles y drones Hutí. Este portaviones es uno de los más antiguos de la US Navy, comisionado en 1977, y se espera que sea desmantelado en 2029, aunque esto podría posponerse.
Capacidades y operaciones recientes del USS Dwight D. Eisenhower
El USS Dwight D. Eisenhower es el segundo de los diez portaviones de clase Nimitz y ha participado en conflictos como la Guerra del Golfo y las operaciones estadounidenses en Irak, Afganistán y Yemen. Hasta la fecha, no ha sido certificado para operar con F-35C, por lo que lleva a bordo F/A-18.
En su sitio web, el USS Dwight D. Eisenhower se describe como el buque insignia del Comandante del Grupo de Ataque de Portaviones (CCSG) 2, ofreciendo una amplia gama de capacidades de misión flexibles, incluyendo operaciones de seguridad marítima, proyección de poder expedicionario, presencia naval avanzada, respuesta a crisis, control del mar, disuasión, contraterrorismo, operaciones de información, cooperación en seguridad y contra la proliferación.
Los recientes ataques lanzados por Estados Unidos y Reino Unido sobre los Hutíes en las provincias norteñas de Sanaa, Hodeidah y Taiz, fueron realizados para disuadir al grupo rebelde de seguir atacando a la navegación civil en el mar Rojo. USCENTCOM informó que las fuerzas destruyeron ocho vehículos aéreos no tripulados en áreas controladas por los Hutíes en Yemen y sobre el mar Rojo.
Participación británica en los ataques contra objetivos Hutí
El Reino Unido declaró que los ataques se realizaron en una operación conjunta con fuerzas estadounidenses para degradar la capacidad de los Hutíes de continuar sus ataques contra la navegación internacional en el mar Rojo y el Golfo de Adén. El Ministerio de Defensa británico indicó que estos ataques han matado a marineros mercantes inocentes de Vietnam y Filipinas y han hundido el buque de carga Rubymar.
El Ministerio de Defensa británico agregó que los aviones Typhoon FGR4 de la Royal Air Force usaron bombas guiadas Paveway IV y fueron reabastecidos por los aviones cisterna Voyager de la RAF. Estos ataques son parte de una quinta ola de ataques contra objetivos militares Hutí en Yemen para degradar aún más sus capacidades.
Las declaraciones del portavoz Hutí y las afirmaciones de precisión de los ataques angloamericanos deben ser consideradas con cautela hasta que se obtenga verificación independiente. La situación en Yemen sigue siendo compleja y volátil, con un impacto significativo en la seguridad regional y la navegación internacional.
Contexto histórico y político de la guerra en Yemen
Yemen es una nación árabe complicada situada en la esquina sur de la península arábiga, con una población de alrededor de 35 millones. El país está dividido religiosamente entre los Hutí chiitas y la mayoría sunita del sur. Entre 1962 y 1990, gran parte de lo que ahora controlan los rebeldes Hutí era un país independiente llamado Yemen del Norte.
En 1990, Yemen del Norte se unió con Yemen del Sur para formar la moderna República de Yemen. Sin embargo, tras la inestabilidad política continua desde la Primavera Árabe de 2011, Yemen colapsó en una guerra civil en 2015. Desde entonces, el país se ha dividido de facto nuevamente entre el norte y el sur.
Los Hutíes, aliados con Irán, se oponen firmemente al Estado de Israel y a la guerra en Gaza. Afirman que sus ataques contra la navegación internacional están dirigidos a barcos afiliados a Israel y son en solidaridad con Gaza. La prolongación de la guerra en Yemen y su impacto en la seguridad marítima internacional sigue siendo un asunto de preocupación crítica.
Repercusiones estratégicas y de seguridad en la región del mar Rojo
la guerra en Yemen y los ataques Hutí en el mar Rojo tienen profundas repercusiones estratégicas. La región del mar Rojo es vital para el comercio marítimo internacional, y cualquier inestabilidad pone en riesgo las rutas de navegación y la seguridad de los buques mercantes.
La participación de fuerzas estadounidenses y británicas en ataques contra los Hutíes subraya la importancia de mantener la seguridad marítima y la estabilidad regional. Los ataques angloamericanos buscan disuadir a los Hutíes de seguir atacando buques civiles y asegurar el libre tránsito por el mar Rojo.
La prolongación de la guerra y la implicación de potencias extranjeras reflejan la complejidad geopolítica de la región. La situación exige una vigilancia continua y una respuesta estratégica coordinada para mitigar las amenazas a la seguridad marítima y regional.
Conclusiones sobre la operación y futuro del USS Dwight D. Eisenhower
El USS Dwight D. Eisenhower sigue desempeñando un papel crucial en las operaciones navales de Estados Unidos en el mar Rojo y más allá. Su capacidad para proyectar poder y mantener la seguridad marítima es fundamental para la estrategia naval estadounidense.
A medida que el Ike se acerca a su desmantelamiento programado en 2029, su historial de servicio y su capacidad operacional siguen siendo testimonio de la fortaleza y resiliencia de los portaviones de clase Nimitz. Sin embargo, la necesidad de modernización y actualización de la flota es evidente para mantener la superioridad naval en un entorno geopolítico en constante cambio.
La situación en Yemen y el mar Rojo subraya la importancia de una presencia naval robusta y capaz. El compromiso de Estados Unidos y sus aliados para asegurar la estabilidad y la seguridad en la región sigue siendo una prioridad estratégica clave.