Desde su vuelo inaugural el 10 de noviembre de 2023, desde la Planta 42 de la Fuerza Aérea en Palmdale, el bombardero furtivo B-21 Raider ha sido sometido a extensivas pruebas de vuelo en la Base Aérea Edwards en California.
“Las pruebas en vuelo representan un paso crucial en la campaña de evaluación gestionada por el Centro de Pruebas de la Fuerza Aérea y la Fuerza de Prueba Combinada (CTF) B-21 del Ala de Pruebas 412 para asegurar la capacidad de ataques penetrantes, de largo alcance, y con alta supervivencia para disuadir agresiones y ataques estratégicos contra los Estados Unidos, sus aliados y socios”, explicó recientemente la Fuerza Aérea.
Northrop Grumman, la compañía encargada de desarrollar el bombardero, señaló que tres unidades del B-21 se encuentran en pruebas en la Base de la Fuerza Aérea Edwards, con una unidad destinada a vuelos y dos a pruebas en tierra.
Este anuncio se realizó en el panel de Actualización del B-21 en la Conferencia ASC 2024, con la participación del general Bussiere, el mayor general Jason Armagost, comandante de la Octava Fuerza Aérea y del Centro de Operaciones de Ataque Global Conjunto; William Bailey, director de la Oficina de Capacidades Rápidas del Departamento de la Fuerza Aérea; y Thomas Jones, presidente de Northrop Grumman Aeronautics Systems.
Jones destacó que actualmente el B-21 puede realizar hasta dos vuelos de prueba por semana, con el objetivo de incrementar a vuelos diarios. “Estoy muy complacido con los avances logrados”, declaró, resaltando la considerable ampliación de las capacidades de vuelo de la aeronave.
Aunque la imagen del avión no proporciona nuevos detalles, se sabe que el Raider es bimotor y que su forma ya fue revelada en fotos anteriores durante su primer vuelo. Aún así, resulta interesante observar cómo el avión genera estelas durante sus vuelos de prueba. Cabe destacar que, al igual que el B-2, el B-21 probablemente esté equipado con un sensor de estelas que alerta a los pilotos cuando deben cambiar de altitud para evitar la formación de estas.
Como residente de Carolina del Sur, presenciar esta obra maestra de la ingeniería durante mi corta estancia en California fue una experiencia asombrosa. Lo curioso es que, aunque nunca vi un B-2 en persona, ya he sido testigo del vuelo de su sucesor.
Poco después de iniciar las pruebas de vuelo, Northrop Grumman recibió el contrato para la producción inicial a pequeña escala del B-21 Raider. Aunque los detalles del contrato no se revelaron, durante la presentación del bombardero en 2022, la Fuerza Aérea indicó que el costo de adquisición por unidad rondaría los $692 millones.
El número de bombarderos incluidos en el contrato inicial no fue detallado, pero informes posteriores al vuelo indican que podrían ser hasta 21 aeronaves. Northrop Grumman aseguró que en el momento del primer vuelo, seis fuselajes del B-21 estaban en diferentes etapas de producción, incluido el avión que voló, apodado “Cerberus”.
En mayo, tanto la Fuerza Aérea como Northrop Grumman difundieron las primeras imágenes oficiales del B-21 en vuelo. Casi al mismo tiempo, Andrew Hunter, encargado de adquisiciones de la Fuerza Aérea, compartió una actualización inusual, afirmando que las pruebas avanzaban satisfactoriamente y manifestando optimismo sobre la consecución de hitos clave durante el año. El general David W. Allvin, jefe del Estado Mayor de la Fuerza Aérea, subrayó que, aunque el plan es adquirir 100 B-21 Raiders, futuros desarrollos tecnológicos podrían limitar la producción.
Durante el panel de actualización del B-21 en la Conferencia ASC 2024, se confirmó que el bombardero completó exitosamente sus pruebas estáticas en la unidad G-1, una de las dos unidades de prueba en tierra empleadas para verificar la integridad estructural del avión. William Bailey, director de la Oficina de Capacidades Rápidas de la Fuerza Aérea, destacó que esta prueba fue esencial para validar el diseño estructural del avión, reforzando la confianza en los modelos digitales. Actualmente, el avión ha pasado a la fase de pruebas de fatiga.
En el mismo panel, también se confirmó que se han contratado 21 bombarderos dentro del marco de la producción inicial a baja tasa, con las primeras entregas previstas para mediados de la década de 2020.
El general Bussiere abordó las amenazas globales actuales y destacó el papel crucial que desempeñará la flota de bombarderos para contrarrestarlas, subrayando las capacidades avanzadas del B-21 como aeronave de sexta generación. Afirmó que el B-21 establece un nuevo estándar global en tecnología militar, añadiendo: “Nadie en el mundo es capaz de hacer lo que nosotros logramos con el B-21, ni de desafiar lo que podemos hacer cuando y donde decidamos”.