Una vez vi un bombardero B-2 Spirit en acción en un espectáculo aéreo. La Fuerza Aérea nos dijo que se trataba de una rara visión pública del ala voladora furtiva, ya que solo se fabricaron 21 unidades. Fue impresionante y sobrecogedor cuando se puso en marcha durante la exposición. Este avión fue diseñado para cambiar el equilibrio de la Guerra Fría con su potencia y largo alcance. Con un coste de al menos 2.000 millones de dólares en dólares de hoy, el bombardero demostró que la Fuerza Aérea consideraba el B-2 como un gran activo.
Quizá no lo sepa
El B-2 ha tenido una historia pintoresca. Hubo una vez un matrimonio que fue piloto de B-2. El teniente coronel John Avery y la teniente coronel Jennifer Avery fueron el primer equipo de pilotos marido y mujer que volaron el bombardero furtivo.
La primera mujer que voló un B-2 ocurrió en 2002
Solo 700 personas en la historia han tripulado el B-2. El B-2 lleva cinco aviadores a bordo: dos pilotos, dos navegadores y un oficial de guerra electrónica. 500 personas han sido pilotos a lo largo de los años, con diez mujeres aviadoras. La primera mujer piloto que voló un B-2 en 2002 fue la teniente coronel Jennifer Avery. Sí, es la misma mujer que se casó con John Avery, el otro piloto de B-2 que formaba el equipo de marido y mujer. Avery recordó su mezcla de emoción y nervios que le hicieron olvidar una pieza clave de su uniforme de vuelo en aquel histórico día: su guante izquierdo.
Pequeño problema en ese primer vuelo de una mujer piloto
Aerotech News relató la primera misión con una mujer aviadora en el B-2. “Cuando estaba recogiendo su paracaídas, su casco y el resto del equipo, cogió dos guantes para la mano derecha. Avery no se dio cuenta hasta que estuvo en la cabina y llegó el momento de rodar. Así que se puso un guante al revés y esperó que el piloto instructor que estaba sentado hombro a hombro con ella no se diera cuenta. Y así fue”. Pero, a pesar de todo, fue un vuelo exitoso.
Los miembros de la tripulación pueden calentar una taza de café con el microondas
El B-2 tuvo que ser modificado para las mujeres piloto que volaban con hombres. El baño del avión necesitaba una cortina de privacidad. A veces el vuelo podía durar decenas de horas, y el vuelo récord tuvo una duración de 44 horas. El avión tiene incluso una cama para hacer siestas rápidas y un microondas para calentar la comida.
La preparación para el lanzamiento de bombas
Las misiones largas son un hecho para la tripulación. El capitán Mike Haffner, piloto de B-2 del 13.º Escuadrón de Bombas, dijo a Defense News que lo principal es mantenerse alerta. “Cuando empiezas la misión, [es importante] no dejarse llevar por una falsa sensación de seguridad porque sientes que tienes 12 horas o más para llegar a la zona del objetivo”, dijo. “Hay que ser productivo y hacer las cosas, así que puedes empezar a hacer turnos de siesta y adelantarte a eso, porque en cuanto te retrasas en la curva de potencia, es algo difícil de recuperar”.
Los médicos estudian los efectos del vuelo de larga distancia
El bombardero tiene un sistema de vuelo por cable, y algunos pilotos describen la experiencia como algo parecido a lo que se siente en un avión comercial a los mandos. La tripulación puede optar por beber café para mantenerse despierta, pero eso crea la necesidad de hacer más pausas para ir al baño. Incluso hay personal médico en la Base de la Fuerza Aérea de Whiteman, Missouri, donde se encuentra el bombardero, que estudia cómo afecta el vuelo de larga distancia al cuerpo humano.
Datos breves sobre el B-2
El programa B-2 comenzó cuando Jimmy Carter era presidente a finales de los años 70. En un principio, la Fuerza Aérea quería tener más de 100 bombarderos, pero los recortes presupuestarios tras la Guerra Fría hicieron que ese número se redujera y ahora solo hay 20 operativos. Los diseñadores afirman que el avión tiene una firma de radar del tamaño de una “paloma”. Entró en combate por primera vez en Kosovo en 1999. Nunca se ha perdido ningún B-2 en un conflicto, pero su funcionamiento cuesta 135.000 dólares por hora.
El B-2 será sustituido por el B-21 Raider de nueva generación. Ha disfrutado de un buen viaje. No puedo pensar en otro avión de guerra que haya tenido como pilotos a un marido y una mujer. Estas tripulaciones demuestran que la gente puede soportar casi dos días completos en un avión. Intenta ir algún día a un espectáculo aéreo para ver cómo se acerca esa gran ala voladora, será un vuelo que siempre recordarás.