El M940 Oostende se incorpora a la Marina belga para reforzar contramedidas de minas con sistemas autónomos, apoya a la OTAN y moderniza operaciones.
Incorporación del M940 Oostende y la modernización belga-neerlandesa
La Marina belga ha reforzado su capacidad marítima con la incorporación del M940 Oostende, un buque de guerra de última generación especializado en contramedidas contra minas que integra tecnologías autónomas y modulares. El buque aumenta la preparación de Bélgica para asegurar rutas marítimas vitales y apoyar las operaciones de guerra de minas de la OTAN. La modernización naval belga avanza con la llegada del M940 Oostende y se orienta hacia una flota digital e interoperable.
Este buque avanzado está concebido para operar junto a sistemas no tripulados dedicados a la detección y la neutralización precisa de minas. Construido en el marco de un programa conjunto de adquisición belga-neerlandés, el navío constituye un avance hacia una flota adecuada para amenazas marítimas complejas en las aguas del norte de Europa. El M940 Oostende es el primero de una serie concebida dentro del programa de Reemplazo de Buques de Contramedidas de Minas.
Esta iniciativa bilateral, lanzada en 2019, prevé la entrega de doce unidades de nueva generación: seis para la Marina belga y seis para la Marina Real de los Países Bajos. El contrato fue adjudicado a Belgium Naval & Robotics, un consorcio integrado por Naval Group y Exail, tras una licitación internacional. El programa incluye los doce buques y también más de un centenar de drones y sistemas robóticos integrados en el conjunto operativo de cada unidad.
El Oostende no es un cazaminas convencional. Introduce un concepto operativo basado en operaciones de distancia de seguridad, en el que el buque permanece fuera de las zonas de riesgo. En lugar de penetrar en aguas minadas, actúa como buque principal desde el cual se lanzan y se controlan diversos sistemas autónomos. Estos vehículos no tripulados, aéreos, de superficie y submarinos, detectan, clasifican y neutralizan minas y reducen al mínimo el riesgo para el personal.
Datos clave del programa y del buque M940 Oostende
- Programa rMCM lanzado en 2019 prevé doce unidades, seis por país.
- Contrato adjudicado a Belgium Naval & Robotics (Naval Group y Exail).
- Operaciones a distancia de seguridad mediante sistemas no tripulados.
- Inspector 125 despliega y recupera sistemas de neutralización desde USV.
- Eslora aproximada 82 metros y desplazamiento cercano a 2.800 toneladas.
Arquitectura de sistemas no tripulados y gestión de combate digital
El núcleo de su capacidad de combate se organiza en un conjunto modular y escalable de herramientas basadas en drones de última generación. Destaca el vehículo submarino autónomo A18-M de Exail, equipado con sonar de apertura sintética que permite cartografiar el fondo marino con alta resolución y localizar minas enterradas o de bajo contenido metálico. El A18-M puede desarrollar misiones autónomas prolongadas en entornos submarinos complejos.
Como apoyo, el sistema incorpora el sonar remolcado T18, un equipo que detecta objetos bajo el agua mediante la emisión y el análisis de ondas acústicas. Este sensor se despliega desde una embarcación de superficie no tripulada (USV), capaz de operar por control remoto o de forma autónoma. El sistema resulta eficaz en aguas litorales poco profundas y permite detectar minas en amplias zonas con alta precisión.
Una vez identificadas las amenazas, se confirma su naturaleza y se procede a su neutralización mediante vehículos operados a distancia, robots submarinos controlados desde el buque principal y desplegados por el dron de superficie Inspector 125. Este USV transporta, lanza y recupera los sistemas de neutralización, opera de manera semiautónoma y mantiene comunicación en tiempo real con el buque principal, lo cual permite la ejecución de tareas independientes con supervisión continua.
Todos los sistemas no tripulados se integran en una plataforma centralizada de gestión de combate de Naval Group. Esta plataforma permite controlar varios drones de forma simultánea, fusionar datos, clasificar amenazas automáticamente y replanificar misiones en tiempo real. Su arquitectura digital, modular y abierta conserva la capacidad de incorporar mejoras futuras en sensores, programas informáticos y cargas útiles. Los vehículos aéreos no tripulados transmiten imágenes y datos en tiempo real al equipo de mando a bordo.
Especificaciones, dotación, despliegue escalonado y formación operativa
Entre las características técnicas del M940 Oostende figuran una eslora aproximada de 82 metros, un desplazamiento cercano a las 2.800 toneladas y un sistema de propulsión híbrido diésel-eléctrico que reduce la firma acústica y la vulnerabilidad frente a detonadores de minas. El casco, construido con materiales no magnéticos y diseñado para resistir explosiones, aumenta la supervivencia en entornos contaminados con minas.
La tripulación básica está formada por entre 30 y 40 personas, con apoyo de equipos rotativos de operadores de drones y especialistas de misión según el perfil operativo. La autonomía del buque permite misiones de varias semanas en áreas de alta amenaza, mientras que sus sistemas autónomos extienden el alcance operativo fuera de la línea de visión del buque.
La incorporación de esta capacidad modifica el enfoque de la Marina belga. El modelo pasa de una defensa costera tradicional a un esquema basado en sistemas no tripulados e integración digital, con capacidad de contribuir a despliegues adelantados de la OTAN en corredores marítimos estratégicos. El M940 resulta adecuado para operar en el mar del Norte, el Báltico y otras zonas litorales poco profundas, donde los cazaminas convencionales enfrentan mayores riesgos.
El despliegue del Oostende inicia una fase escalonada que prevé la entrega de seis buques para la Marina belga, cada uno con su propio conjunto de sistemas no tripulados. La segunda unidad se encuentra en pruebas finales de integración y la flota completa deberá estar entregada antes de 2030. En paralelo, seis unidades gemelas entrarán en servicio en la Marina Real de los Países Bajos, con el fin de reforzar la cooperación marítima entre aliados.
Formación, transferencia de conocimiento y mejora evolutiva continua
Además de la construcción naval, el programa rMCM incluye un sistema de formación para el personal belga. Las tripulaciones se capacitan mediante un enfoque integral que combina instrucción marítima, operación de sistemas robóticos y mando de misiones. Los especialistas en drones reciben formación directa en instalaciones de Naval Group y Exail, lo que facilita la transferencia de conocimiento y permite autonomía operativa a largo plazo para la Marina belga.
Con los primeros sistemas ya en servicio, el proceso de perfeccionamiento continúa. Los componentes no tripulados del conjunto se diseñaron para admitir actualizaciones periódicas. Las mejoras de programas informáticos y las nuevas capacidades se desarrollan en estrecha colaboración entre las fuerzas navales y la industria. Este trabajo conjunto mantiene la evolución del sistema y preserva la integración de sensores, programas informáticos y cargas útiles en el conjunto operativo de cada unidad.
Los especialistas en drones reciben formación directa en instalaciones de Naval Group y Exail, lo que facilita la transferencia de conocimiento y permite autonomía operativa a largo plazo. Las tripulaciones se capacitan mediante un enfoque integral que combina instrucción marítima, operación de sistemas robóticos y mando de misiones, y el programa rMCM incluye un sistema de formación para el personal belga.
Las primeras entregas de módulos autónomos están previstas para finales de noviembre de 2025, y se han programado mejoras con posterioridad. El M940 Oostende introduce una capacidad de guerra de minas basada en sistemas no tripulados, alineada con los estándares de la OTAN. El programa no se limita a reemplazar unidades anteriores, sino que incorpora una arquitectura operativa en la Marina belga y reduce la exposición del personal y aumenta precisión en detección y neutralización.
