Las Fuerzas Aeroespaciales Rusas simularon ataques con Tu-22M3 contra objetivos enemigos en maniobras conjuntas con Bielorrusia, que involucran miles de efectivos hasta el 16 de septiembre.
Ejercicios Zapad 2025 involucran fuerzas rusas y bielorrusas en simulacros conjuntos
Las Fuerzas Aeroespaciales Rusas desplegaron bombarderos de largo alcance Tu-22M3 para simular ataques contra objetivos enemigos como parte de los ejercicios militares conjuntos ruso-bielorrusos Zapad 2025, en curso desde el 12 de septiembre de 2025, con el fin de interrumpir sistemas de control y destruir instalaciones críticas, según informó el ministerio de Defensa ruso. Los ejercicios Zapad 2025, que se extenderán hasta el 16 de septiembre, involucran a las fuerzas armadas de Rusia y Bielorrusia en terrenos de entrenamiento distribuidos en ambos países, incluyendo zonas en el mar Báltico y el mar de Barents.
Russian MiG-31s conduct exercises during Zapad 2025 pic.twitter.com/ZmF00ZcKEG
— Preston Stewart (@prestonstew_) September 14, 2025
Autoridades bielorrusas indicaron inicialmente la participación de alrededor de 13.000 efectivos, aunque estimaciones de inteligencia lituana sugieren que el número real podría ascender a 30.000 soldados en la región. Las maniobras se dividen en dos etapas: la primera simula la repulsa de una agresión contra la Unión Estatal ruso-bielorrusa, mientras que la segunda se centra en la restauración de la integridad territorial y la derrota de fuerzas enemigas con apoyo de coaliciones de estados aliados.
Bielorrusia, que limita con miembros de la OTAN como Polonia, Lituania y Letonia, realiza las principales actividades en áreas interiores, como alrededor de la ciudad de Barysaw, a 74 kilómetros al noreste de Minsk, aunque unidades menores operan cerca de las fronteras con Polonia y Lituania. En el componente aéreo, los bombarderos Tu-22M3 operaron en parejas desde una altitud de aproximadamente 1.000 metros para ejecutar bombardeos prácticos contra blancos en un polígono de entrenamiento.
El ministerio de Defensa ruso precisó que estas acciones incorporaron experiencia acumulada en operaciones reales, con el objetivo explícito de neutralizar centros de mando y estructuras vitales del adversario simulado. Además de los Tu-22M3, las fuerzas rusas emplearon aviones de combate Su-34 para realizar ataques de bombardeo, y la fragata Almirante Golovko lanzó un misil hipersónico Zircon contra un objetivo marítimo en el mar de Barents.
Elementos clave en componentes aéreos y navales de Zapad 2025
- Bombarderos Tu-22M3 operaron en parejas a 1.000 metros para bombardeos prácticos contra blancos en polígonos.
- Aviones Su-34 ejecutaron ataques de bombardeo al incorporar experiencia de operaciones reales.
- Fragata Almirante Golovko lanzó misil hipersónico Zircon contra objetivos en mar de Barents.
- MiG-31K simularon impactos con misiles Kinzhal de alcance hasta 298 millas en sector marítimo.
- Bielorrusia incorporó drones, guerra electrónica e inteligencia artificial para decisiones en terreno.
Tensiones con OTAN se exacerban por incursiones de drones y respuestas fronterizas
Los MiG-31K, equipados con misiles hipersónicos Kinzhal capaces de portar ojivas nucleares o convencionales, llevaron a cabo simulaciones de impactos en el mismo sector, con un alcance de hasta 298 millas. El contexto de estos ejercicios incluye tensiones recientes con la OTAN, exacerbadas por la incursión de drones rusos en el espacio aéreo polaco el 10 de septiembre, lo que llevó a Polonia a derribar los aparatos y cerrar su frontera con Bielorrusia a medianoche del 12 de septiembre.
El viceministro de Defensa polaco, Cezary Tomczyk, reportó la movilización de 30.000 soldados en el ejercicio polaco “Defensor de Hierro” y 5.000 en la frontera. Lituania reforzó sus medidas de protección fronteriza en respuesta a las maniobras. El Kremlin calificó las preocupaciones europeas como una reacción emocional basada en hostilidad, y negó intenciones provocativas en las incursiones de drones al atribuirlas a operaciones contra el oeste de Ucrania.
El presidente estadounidense Donald Trump describió el incidente como posiblemente un error y expresó esperanza en una resolución pacífica. Bielorrusia, aliada cercana de Rusia, acoge armas nucleares tácticas rusas desde 2023 y prepara la estación de misiles hipersónicos Oreshnik para la segunda mitad de 2025, que permanecerán bajo control ruso, pero permitirán a Minsk seleccionar objetivos.
En diciembre de 2024, ambos países firmaron un pacto por el cual Moscú ofrece garantías de seguridad a Minsk, incluyendo posible apoyo nuclear en caso de agresión. El líder bielorruso Alexander Lukashenko, respaldado por el presidente ruso Vladimir Putin durante la guerra en Ucrania iniciada en 2022, liberó a 52 prisioneros a solicitud de Trump para mejorar relaciones con Estados Unidos, en medio de sanciones occidentales.
Alianza ruso-bielorrusa fortalece integración militar en Unión Estatal desde 1999
Aunque Bielorrusia no ha enviado tropas a Ucrania, su territorio sirvió de base para el avance ruso en la invasión, cinco meses después de los ejercicios Zapad 2021, que involucraron oficialmente 12.800 efectivos en suelo bielorruso, pero hasta 200.000 en la región según fuentes rusas. La OTAN evaluó la amenaza potencial desde territorio bielorruso en relación con Zapad 2025.
Minsk invitó a todos los Estados miembros de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, así como a nueve países con agregados militares de la OTAN en la capital bielorrusa, para observar las maniobras y verificar su carácter defensivo. Las fuerzas de la Flota del Báltico ruso eliminaron grupos de sabotaje submarino enemigo simulado, mientras que sistemas de misiles costeros Bastion, de la Flota del Norte, dispararon desde la isla Zemlya Alexandra contra objetivos navales.
Tropas aerotransportadas rusas cargaron aviones de transporte como parte de las operaciones, y tanques del Distrito Militar de Moscú impactaron unidades avanzadas del enemigo ficticio en Bielorrusia. Los ejercicios incorporan elementos navales, con la Flota del Norte táctica desplegada en la isla Franz Josef Land para defender costas árticas.
El ministerio de Defensa ruso reportó avances en el Distrito Militar Oeste, donde unidades mejoraron posiciones tácticas e infligieron pérdidas a formaciones ucranianas en zonas adyacentes, aunque estos progresos se vinculan a operaciones especiales separadas de Zapad 2025. La coordinación entre Moscú y Minsk fortalece la Unión Estatal, establecida en 1999, con énfasis en la integración militar.
Coordinación bielorrusa integra tecnologías modernas en defensa contra agresiones externas
Autoridades bielorrusas, como el jefe del Estado Mayor general Pavel Muraveiko, resaltaron el uso de tecnologías modernas para simular escenarios de defensa contra agresiones externas. Polonia y Lituania, como miembros de la OTAN, mantienen vigilancia elevada, con ejercicios paralelos para contrarrestar posibles amenazas. En el marco marítimo, la Flota del Báltico practicó la eliminación de grupos de sabotaje submarino al emplear buques y aviación para detectar y neutralizar amenazas en aguas costeras.
Los misiles Zircon, lanzados desde la fragata Almirante Golovko, alcanzaron blancos simulados a distancias considerables y demostraron capacidades hipersónicas. Los Kinzhal, transportados por MiG-31K, simularon ataques contra objetivos estratégicos en el mar de Barents, zona estratégica próxima a territorio de la OTAN. Bielorrusia, por su parte, integra sus fuerzas en la defensa conjunta, con énfasis en la protección de fronteras occidentales.
El pacto de seguridad de diciembre de 2024 formaliza el compromiso ruso de asistir a Minsk en escenarios de crisis, incluyendo el empleo de arsenales nucleares si se considera necesario. Las maniobras Zapad ocurren cada cuatro años desde 2009, con ediciones previas que han generado alertas en Occidente por su escala y proximidad a fronteras de la OTAN.
En 2021, las actividades precedieron la invasión rusa de Ucrania, donde Bielorrusia facilitó rutas de avance. Actualmente, con la guerra en curso, los ejercicios resaltan la postura defensiva de la Unión Estatal frente a percepciones de amenazas externas. El ministerio de Defensa ruso mantiene que todas las acciones se ajustan a protocolos internacionales, y Minsk asegura que las distancias de las maniobras principales evitan provocaciones directas.