La escasa construcción de refugios para aviones en bases estadounidenses contrasta con el avance chino, creando una ventaja estratégica desestabilizadora en el Pacífico.
China fortalece su infraestructura mientras EE. UU. se queda atrás
La construcción de refugios reforzados para aeronaves, aunque menos atractiva que la producción de aviones avanzados, se perfila como una necesidad estratégica clave para Estados Unidos en un posible enfrentamiento con China. Según expertos del Instituto Hudson, el desequilibrio actual en la infraestructura de bases aéreas podría dar una ventaja significativa al Ejército Popular de Liberación (EPL) en caso de un ataque sorpresa.
Durante la última década, China ha construido cientos de refugios reforzados en el Pacífico occidental para proteger su fuerza aérea, mientras que Estados Unidos apenas ha completado unos pocos. Esta disparidad podría facilitar que el EPL neutralice las bases estadounidenses mediante misiles, paralizando su poder aéreo desde tierra. Timothy Walton, experto del Instituto Hudson, declaró que “sin una mejora rápida en la resistencia de los aeródromos, es razonable esperar que los aviones sean destruidos en tierra”.
Para contrarrestar esta amenaza, la Fuerza Aérea de Estados Unidos ha implementado el concepto de Empleo Ágil de Combate (ACE), que dispersa equipos y aeronaves hacia bases remotas. Sin embargo, Walton señaló que esta estrategia de dispersión, sin un fortalecimiento adicional, es insuficiente debido a las avanzadas capacidades de vigilancia y ataque de China.
Según Walton, “la dispersión no es suficiente. Si te dispersas, los chinos pueden rastrearte y atacarte en los nuevos lugares”. Además, existe el riesgo de mover recursos a posiciones con menos defensas, convirtiéndolos en objetivos más fáciles de eliminar.
Desequilibrio estratégico: datos clave sobre la brecha en protección aérea
- China ha construido cientos de refugios reforzados para aviones en los últimos 10 años, mientras que EE. UU. ha construido solo unos pocos.
- El EPL cuenta con 1.300 misiles balísticos de alcance medio y 500 misiles de alcance intermedio o largo que pueden alcanzar Guam.
- Los refugios reforzados chinos requieren más municiones para neutralizarlos, haciendo más costosa su destrucción en comparación con bases sin estas defensas.
- EE. UU. carece de una estrategia integral de fortalecimiento de bases, lo que incentiva a China a lanzar un ataque preventivo.
Las capacidades chinas amenazan las bases estadounidenses
Los expertos también subrayaron que China ha ampliado significativamente sus capacidades ofensivas. Según Thomas Shugart, coautor del informe y exoficial naval, el EPL ha desarrollado una fuerza militar capaz de ejecutar un devastador ataque inicial contra Estados Unidos y sus aliados en el Pacífico. Entre las armas más preocupantes está la Fuerza de Cohetes del EPL, que ha aumentado drásticamente su arsenal de misiles balísticos en los últimos años.
Shugart explicó que en un escenario de ataque sorpresa, los misiles chinos podrían inutilizar pistas de aterrizaje, destruir aeronaves en tierra y atacar centros de comando esenciales. “Han creado una fuerza diseñada para actuar rápidamente y parecen practicar estas estrategias de manera regular”, dijo Shugart.
Además, imágenes comerciales de código abierto muestran que China ha construido objetivos de práctica que simulan aviones de alerta temprana estadounidenses y japoneses, lo que sugiere una preparación para ataques específicos. Walton añadió que las defensas pasivas estadounidenses, como refugios reforzados y camuflaje, son insuficientes para contrarrestar este tipo de amenazas.
Las autoridades estadounidenses han reconocido esta vulnerabilidad. Sin embargo, la falta de avances significativos en el fortalecimiento de bases plantea dudas sobre la capacidad de disuasión de Estados Unidos en la región.
Los desafíos políticos y culturales en la inversión de defensa
Además de los problemas tácticos, el informe del Instituto Hudson señaló obstáculos internos para abordar esta brecha de infraestructura. Según Shugart, los factores culturales dentro de la Fuerza Aérea han contribuido a priorizar aviones avanzados sobre refugios reforzados. “La Fuerza Aérea prefiere gastar en aviones de combate que en concreto”, afirmó.
La política de financiación también complica la situación. Los proyectos de construcción militar son aprobados como parte de un paquete legislativo que incluye al Departamento de Asuntos de Veteranos, lo que desvía los recursos hacia proyectos nacionales en lugar de infraestructuras en el extranjero.
Shugart explicó que “es difícil justificar ante el público el gasto de dinero en concreto en Japón”. Esta falta de inversión ha dejado a las bases estadounidenses en el Pacífico occidental expuestas, mientras que China continúa fortaleciendo sus bases cercanas a Taiwán.
El impacto de la brecha en la disuasión estratégica
La diferencia en las capacidades de defensa pasiva entre China y Estados Unidos crea un grave riesgo estratégico. Según Walton, las bases estadounidenses requieren más municiones para defenderse de los ataques chinos que las bases del EPL para ser neutralizadas, lo que incentiva a China a actuar primero.
Este desequilibrio en la capacidad de resistencia de las bases podría tener consecuencias desestabilizadoras, ya que reduce la eficacia de la disuasión estadounidense. Sin refugios reforzados y defensas pasivas adicionales, Estados Unidos enfrenta un mayor riesgo de sufrir pérdidas significativas en caso de un ataque sorpresa en el Pacífico occidental.
El informe concluyó que, a menos que se implementen mejoras sustanciales en la infraestructura de defensa, el EPL mantendrá una ventaja estratégica significativa que podría cambiar el equilibrio de poder en la región.