El F-15E Strike Eagle despliega seis lanzacohetes LAU-131A con 42 cohetes guiados APKWS II para contrarrestar drones en la región.
F-15E de CENTCOM refuerza defensa antidrones con APKWS II
El Comando Central de Estados Unidos (CENTCOM) difundió una fotografía que muestra un F-15E Strike Eagle desplegado en Oriente Medio equipado con un arsenal antidrones. La aeronave porta seis lanzacohetes LAU-131A/A, cada uno con siete cohetes guiados por láser AGR-20 APKWS II, sumando un total de 42 cohetes. Además, el avión lleva cuatro misiles aire-aire AIM-9X y cuatro AIM-120C/D, configurando un total de 50 oportunidades de enfrentamiento sin contar su cañón interno de 20 mm. La imagen, publicada en mayo de 2025, no especificó la ubicación del avión, pero analistas de inteligencia de fuentes abiertas geolocalizaron la fotografía en la Base Aérea Muwaffaq Salti en Jordania, identificando la aeronave como perteneciente al 389th Fighter Squadron de Mountain Home, Idaho.
Este equipamiento, observado previamente en pruebas en la Base Aérea de Eglin, Florida, en mayo de 2025, marca un avance en la capacidad de los F-15E para contrarrestar vehículos aéreos no tripulados (UAV). Los cohetes APKWS II, originalmente diseñados para ataques aire-tierra, se adaptaron para roles aire-aire tras pruebas exitosas en 2019, cuando un F-16 derribó un dron subscale en una demostración en el Golfo de México. Desde 2024, los F-16 de la Fuerza Aérea de EE. UU. han utilizado estos cohetes en misiones sobre el mar Rojo, interceptando drones lanzados por los hutíes respaldados por Irán.
Durante operaciones en el mar Rojo, los F-16 emplearon los cohetes APKWS II en configuraciones que triplicaron su capacidad de enfrentamiento en comparación con cargas estándar de misiles. Una configuración típica de seis misiles AIM-9X y AIM-120 se amplió a 14 o 28 disparos al añadir uno o dos lanzacohetes LAU-131A/A. Cada cohete, con un costo aproximado de 30.000 dólares, contrasta con los 450.000 dólares de un AIM-9X y el 1 millón de dólares de un AIM-120, ofreciendo una solución económica contra drones de bajo costo, valorados en unos 15.000 dólares. Sin embargo, los cohetes son efectivos solo contra objetivos de baja maniobrabilidad, como drones y misiles de crucero subsónicos.
El F-15E lleva esta capacidad al extremo. Con seis lanzacohetes LAU-131A/A, el Strike Eagle puede enfrentar hasta 42 blancos con cohetes, además de ocho misiles aire-aire, superando las limitaciones observadas en abril de 2024, cuando los F-15E interceptaron drones iraníes dirigidos contra Israel. En esa operación, algunos aviones agotaron sus misiles y recurrieron sin éxito a su cañón M61 Vulcan. La nueva configuración permite al Oficial de Sistemas de Armas designar blancos con el Sniper Advanced Targeting Pod mientras el piloto ejecuta el ataque, eliminando la necesidad de operar en parejas, como ocurre con los F-16.
Datos clave sobre el APKWS II en operaciones antidrones
- El APKWS II convierte cohetes Hydra 70 de 70 mm en municiones guiadas por láser, con un costo de 15.000-20.000 dólares por unidad de guiado.
- La versión AGR-20 FALCO, optimizada para roles aire-aire, se desplegó en el área de responsabilidad del CENTCOM en 2024, logrando alta probabilidad de impacto.
- En 2025, BAE Systems presentó una variante de modo dual con un buscador infrarrojo, permitiendo guiado autónomo tras designación láser inicial.
- El sistema se integró en plataformas como F-16, A-10, AV-8B, F/A-18, AH-64, y MH-60, con 17 plataformas calificadas hasta 2025.
- El APKWS II logró una tasa de acierto superior al 93% en operaciones de combate desde 2020.
Evolución del APKWS II para contrarrestar amenazas aéreas
El APKWS II, desarrollado por BAE Systems, transforma el cohete Hydra 70 no guiado en una munición de precisión mediante un kit de guiado WGU-59/B. Este kit, ubicado entre la ojiva y el motor, incorpora el sistema DASALS con cuatro alas desplegables que contienen ópticas de búsqueda láser, permitiendo un campo de visión de 40 grados y un alcance de detección de hasta 14 km. El cohete alcanza blancos a 1.100-5.000 metros en menos de cinco segundos, con un alcance potencial de 12-15 km en desarrollo.
En 2021, el APKWS II demostró su capacidad antidrones al derribar un UAS de Clase 2 con una espoleta de proximidad, validando su uso en roles C-UAS. En 2024, el programa FALCO optimizó el cohete para enfrentamientos aire-aire, actualizando el software para mejorar la precisión contra drones lentos. En abril de 2025, BAE Systems exhibió una variante de modo dual en la conferencia Sea Air Space, incorporando un buscador infrarrojo que permite un modo de disparo pseudo-independiente, reduciendo la necesidad de designación láser continua. Esta mejora, en fase de desarrollo hasta 2026, incrementará la eficiencia contra enjambres de drones.
El APKWS II se integró en el F-15E tras pruebas en Eglin en mayo de 2025, donde se validó una carga de 42 cohetes. Esta configuración se desplegó rápidamente en la Base Aérea Muwaffaq Salti, un centro clave para operaciones de los F-15E en la defensa de Israel contra ataques iraníes en 2024. La capacidad de los F-15E para llevar 50 armas aire-aire transforma al avión en una plataforma antidrones de alta capacidad, capaz de enfrentar oleadas de amenazas de bajo costo.
El sistema también se utiliza en otras plataformas estadounidenses, incluyendo los A-10C, F-16, AV-8B Harrier, F/A-18C/D Hornet, AH-1Z Viper, UH-1Y Venom, MH-60R/S, y AH-64D/E Apache. En 2013, el A-10 lanzó cohetes APKWS II a altitudes de 10.000 y 15.000 pies, logrando impactos precisos. En 2016, un F-16 destruyó un blanco aéreo en una demostración anticruceros, consolidando la versatilidad del sistema.
Impacto operativo del APKWS II en conflictos recientes
Desde su entrada en producción total en 2012, el APKWS II se ha empleado en múltiples teatros de operaciones. En Afganistán, los AH-1W Cobra y UH-1Y Venom dispararon cientos de cohetes contra insurgentes entre 2012 y 2013, logrando una precisión del 93%. En Irak, los AH-64 Apache utilizaron el sistema para ataques de apoyo aéreo cercano. En 2024, los F-16 en el mar Rojo derribaron más de 200 drones hutíes en vuelo, mientras que otros 120 fueron destruidos en tierra.
La operación de abril de 2024 contra drones y misiles iraníes dirigidos a Israel destacó la necesidad de mayores capacidades antidrones. Los F-15E, limitados por sus cargas de misiles, enfrentaron dificultades para mantener la interceptación continua. La integración del APKWS II en 2025 responde a esta lección, proporcionando una solución de alta capacidad y bajo costo. La configuración de 42 cohetes permite a los F-15E sostener enfrentamientos prolongados contra enjambres de drones, un escenario cada vez más común en conflictos modernos.
El APKWS II también se ha adaptado para roles terrestres. En 2021, BAE Systems probó una variante tierra-tierra en plataformas como el EAGLS y el VAMPIRE, utilizados por Estados Unidos y Ucrania contra drones rusos. En 2025, Ucrania empleó el APKWS II desde helicópteros Mi-24V, integrados con sistemas de designación láser, demostrando su flexibilidad en conflictos asimétricos.
La evolución del APKWS II refleja un enfoque estratégico para contrarrestar amenazas aéreas emergentes. Su integración en el F-15E, junto con mejoras como el buscador infrarrojo, posiciona al sistema como una herramienta clave para operaciones antidrones en entornos disputados, manteniendo la superioridad aérea a un costo sostenible.