En los últimos días, ha surgido una controversia internacional debido a los supuestos esfuerzos de China por llevar a cabo una operación ilegal de rescate de un acorazado hundido durante la Segunda Guerra Mundial.
Mientras el mundo dirigía su atención hacia los trabajos de reparación del portaaviones HMS Prince of Wales de la Royal Navy, otro HMS Prince of Wales se ha colado en los titulares, pero este no es una historia de restauración, sino de recuperación ilegal. La situación ha provocado un debate acalorado, ya que los buques de guerra hundidos se consideran tradicionalmente tumbas de guerra, lo que genera un conflicto ético y patrimonial.
Antecedentes sobre el Hundimiento del HMS Prince of Wales y el HMS Repulse
Para comprender mejor el contexto de esta situación, es importante remontarnos al 10 de diciembre de 1941. En esa fecha, el acorazado HMS Prince of Wales y el crucero de batalla HMS Repulse fueron hundidos por la aviación japonesa en las aguas de Malasia. Estos buques de guerra se convirtieron tristemente en las primeras víctimas de la aviación naval en alta mar durante la Segunda Guerra Mundial, marcando el final de una era de acorazados imponentes.
Desde entonces, estos pecios han sido considerados tumbas de guerra oficiales y se les ha otorgado un estatus especial para honrar a aquellos que perdieron la vida en ellos.
El Desenterramiento de la Controversia
Recientemente, se han reportado avistamientos del buque chino Chuan 68 rondando ilegalmente el área donde se encuentran hundidos el HMS Prince of Wales y el HMS Repulse. Según los informes, este buque chino está buscando extraer acero de alta calidad utilizado en la construcción de los cascos de los buques de guerra. Este acto ha generado una gran preocupación y ha desatado la ira de la prensa británica, que considera este salvamento ilegal como un ataque personal contra la Royal Navy y su legado histórico.
El almirante Lord Alan West, ex jefe de la Royal Navy, expresó su indignación ante estas acciones, calificándolas de repugnantes y dolorosas para las familias y los parientes más cercanos de los marineros fallecidos en el HMS Repulse y el HMS Prince of Wales. West declaró: «Son cementerios con todos los cadáveres todavía allí. A estos desguazadores o chatarreros chinos esto les importa un bledo». Estas fuertes palabras reflejan la profunda sensibilidad y el respeto que se espera hacia los restos de los buques de guerra y los que descansan en ellos.
Esfuerzos Oficiales de Recuperación y Preservación
Hasta el momento, solo se han recuperado oficialmente las campanas de los buques de guerra, las cuales se encuentran en exhibición en el Museo Nacional de la Marina Real, ubicado en el Astillero Histórico de Portsmouth. Sin embargo, este incidente ha resaltado la necesidad de abordar la problemática de las operaciones ilegales de rescate de pecios históricos en todo el mundo.
El profesor Dominic Tweddle, director general del Museo Nacional de la Royal Navy, ha expresado su preocupación por el vandalismo en beneficio propio del HMS Prince of Wales y el HMS Repulse. Tweddle ha instado a la implementación de una estrategia de gestión del patrimonio naval subacuático que permita proteger y conmemorar adecuadamente estos buques. Además, ha hecho un llamado a la Royal Navy para que desarrolle una política integral que investigue y gestione los más de 5.000 pecios existentes antes de que se pierdan para siempre.
Preocupaciones Internacionales y Otros Pecios Hundidos
Este incidente en China no es un caso aislado. Además de los buques británicos, se han encontrado restos de 40 buques de guerra y mercantes australianos, holandeses y japoneses en las mismas aguas frente a Indonesia y Singapur. Incluso ha habido informes de que el mismo buque chino ha saqueado los restos de buques de guerra holandeses hundidos en el Mar de Java.
Esta situación ha generado una creciente preocupación internacional y ha resaltado la necesidad de abordar de manera urgente el problema de las operaciones ilegales de salvamento de pecios históricos.
Importancia de Preservar la Historia Naval
Preservar estos buques de guerra hundidos es crucial no solo para honrar a las tripulaciones que sirvieron en ellos y sacrificaron sus vidas, sino también para mantener viva la historia de la Royal Navy y su valiosa contribución durante la Segunda Guerra Mundial.
Cada buque hundido cuenta una historia y representa un testimonio tangible de los eventos que dieron forma al pasado. Al preservar estos pecios y protegerlos de la destrucción y el saqueo, aseguramos que las futuras generaciones puedan apreciar y aprender de ellos.
Conclusion
En resumen, el presunto rescate ilegal de acorazados de la II Guerra Mundial por parte de China ha generado una gran controversia a nivel internacional. La Royal Navy y la comunidad internacional han condenado enérgicamente estas acciones, ya que los buques hundidos son considerados tumbas de guerra y merecen el respeto y la protección debidos.
Es necesario establecer una estrategia de gestión del patrimonio naval subacuático que permita proteger y conmemorar adecuadamente estos pecios históricos. Asimismo, se hace un llamado a que la Royal Navy desarrolle políticas que investiguen y preserven los buques naufragados antes de que se pierdan para siempre.