• Quiénes somos
  • Contacto
  • Embajadas
  • Oficina PM
  • Directorio
  • Jerusalén
  • Condiciones de servicio
  • Política de Privacidad
  • Login
  • Register
sábado, noviembre 15, 2025
Noticias de Israel
  • Inicio
  • FDI
  • Gaza
  • Terrorismo
  • Mundo
  • Zona de guerra
  • Siria
  • Irán
  • Antisemitismo
  • Tecnología
  • Arqueología
Noticias de Israel

Portada » Zona de guerra » Cómo se armó el F-35 “Franken-Lightning”

Cómo se armó el F-35 “Franken-Lightning”

15 de noviembre de 2025
El F-35 “Franken-Lightning” regresa a servicio

Los aviadores del 388th Fighter Wing completaron un largo proyecto para restaurar un solo F-35A Lightning II a partir de dos aeronaves dañadas separadas y comenzar su regreso a la capacidad de combate. (Fotografía de la Fuerza Aérea de EE. UU. por Todd Cromar)

La JPO unió secciones de dos F-35 dañados para reconstruir uno en Hill AFB y Fort Worth; voló el 24/01/2025 y regresó operativo el 26/03/2025.

Origen, cronología y coordinación del proyecto F-35 ‘Franken-Lightning’

El F-35A Lightning II apodado “Franken-Lightning” nació de una intervención que combinó secciones utilizables de dos aparatos dañados para obtener un caza operativo. La Oficina Conjunta del programa F-35 dirigió el trabajo en Hill Air Force Base, Utah, y en instalaciones de Lockheed Martin en Fort Worth, Texas. Voló tras la reparación el 24 de enero de 2025 y volvió a Hill el 26 de marzo de 2025, con objetivo de recuperar capacidad a menor coste.

El aparato base fue el AF-211, afectado en junio de 2020 por una avería del tren delantero que deformó su morro y parte del fuselaje frontal. Para completar la reconstrucción se empleó el morro del AF-27, un F-35 siniestrado por incendio de motor en 2014 en Eglin, Florida. La oficina del programa autorizó desensamblar la sección dañada del AF-211 y acoplar, tras inspecciones y acondicionamiento, el conjunto delantero procedente del AF-27.

La iniciativa se gestó a finales de 2022, cuando la JPO, el 388th Fighter Wing y Lockheed Martin iniciaron un proyecto, el primero de su tipo en el F-35: trasplantar la sección delantera entre dos células. El Ogden Air Logistics Complex realizó desmontaje, alineación y reacoplamiento, creando útiles, bancadas y un sistema de mantenimiento móvil para sostener y posicionar con precisión los conjuntos, con aplicación en reparaciones de batalla y ampliación de capacidades fuera del depósito.

Una vez unida la estructura, el 388th Fighter Wing y técnicos de Lockheed Martin completaron tareas no habituales en una escuadrilla. Se reinstalaron trenes de aterrizaje atendiendo al centrado de masas, se extendió nuevo cableado, se reconstruyó la cabina, se integraron ordenadores de aviónica y se montaron y ajustaron superficies de mando. Además, se fabricaron y colocaron bandas de refuerzo compuestas “belly bands” para asegurar continuidad estructural y se restauraron perfiles y recubrimientos de baja observabilidad.

Un vistazo al “Franken-Lightning” construido a partir de dos F-35
El “Franken-bird” F-35 en rodaje (Todas las imágenes, Victoria Fontana, a menos que se indique lo contrario)

Claves técnicas y cronológicas del caso Franken-Lightning

  • Primer vuelo postreparación el 24 de enero de 2025 en Utah.
  • Reincorporación operativa en Hill AFB el 26 de marzo de 2025.
  • Coste de reparación: $11,7 millones, bajo presupuesto.
  • Ahorro estimado frente a un F-35A nuevo: $63 millones.

Pruebas, certificaciones e impacto público del F-35 ‘Franken-Lightning’

Las pruebas funcionales se realizaron en Hill AFB. El vuelo de comprobación llevó el avión a los límites de su envolvente aprobada sin incidencias reportadas. Después, se trasladó a Fort Worth para certificaciones finales en la línea del F-35 y, concluidas, retornó a Utah. La USAF difundió imágenes con imprimaciones visibles en el nuevo morro y zonas de unión, coherentes con el acabado posterior a trabajos estructurales y de recubrimiento furtivo.

El factor económico fue central. La JPO informó que la reparación tomó dos años y cinco meses, costó $11,7 millones y cerró 2,8 millones por debajo del presupuesto. Con la intervención se evitó adquirir un F-35A nuevo, con un ahorro cifrado en 63 millones. Comunicaciones previas de la unidad habían estimado un coste inferior a seis millones durante la fase final, pero el parte posterior consolidó la cifra definitiva.

La trazabilidad de los siniestros sustentó la disponibilidad de secciones. El AF-27 quedó fuera de servicio tras el incendio de motor de 2014; su sección delantera se preservó en Hill AFB para instrucción en reparación de daños de combate y se recuperó para el trasplante. El AF-211, con colapso de tren de morro en 2020, conservaba estructura reparable. Algunos medios citaron “17-5269”; oficialmente se mantiene AF-211 con morro de AF-27.

La comunicación pública detalló hitos y actores. La JPO situó el inicio formal a finales de 2022 y destacó la coordinación entre el 388th Fighter Wing, el complejo logístico de Ogden y Lockheed Martin. Tras el vuelo de enero de 2025, el caza cumplió certificaciones en Texas y, el 26 de marzo, se reincorporó al 4th Fighter Generation Squadron en Hill AFB, con asignación prevista al 4th Fighter Squadron y cobertura en medios especializados y generalistas.

Procedimiento de injerto, mantenimiento y justificación operativa del F-35

El F-35 restaurado antes de su vuelo de prueba de funcionamiento. (Fotografía de la Fuerza Aérea de EE. UU. por Todd Cromar)

Los equipos separaron en bancada las secciones delantera y central, prepararon superficies de empalme y aseguraron referencias geométricas y alineación mediante útiles de sujeción diseñados a medida. Ejecutaron operaciones de unión estructural con refuerzos adicionales en la zona del encaje para garantizar continuidad y resistencia. Ese trabajo habilitó el injerto del conjunto delantero del AF-27 sobre la célula base AF-211, cumpliendo las tolerancias requeridas por la documentación técnica del programa F-35.

Posteriormente se reinstalaron sistemas de control de vuelo y se verificó la continuidad de cableados y latiguillos, se recalibraron sensores y se aplicaron tratamientos anticorrosión junto con recubrimientos de baja observabilidad en las áreas intervenidas. La verificación incluyó comprobaciones en tierra y vuelo funcional en Hill AFB, seguidas de la revisión del fabricante en Fort Worth, proceso que confirmó la integridad del conjunto antes de su retorno a la unidad operativa.

La experiencia generó cambios organizativos y doctrinales. La unidad de Hill documentó que, al ejecutar tareas inéditas en el nivel de escuadrilla, remitió datos y recomendaciones a la JPO para actualizar la documentación técnica que rige la instalación e inspección de nuevos componentes en toda la flota F-35. La USAF encuadró el proceso como madurez del mantenimiento de campo., utillaje y secuencias para reconstrucciones mayores lejos de depósitos especializados.

La justificación operativa se expresó en disponibilidad y coste. Con la unión de dos fuselajes no recuperables por separado, el programa incorporó una aeronave adicional a menor gasto y plazo que un F-35A nuevo, y obtuvo aprendizaje aplicable a reparaciones complejas. El JPO cifró un ahorro de 63 millones, mientras los mandos de Hill destacaron la formación práctica del personal y el desarrollo de utillaje móvil reutilizable para futuras intervenciones.

© 2017–2025

Welcome Back!

Login to your account below

Forgotten Password? Sign Up

Create New Account!

Fill the forms below to register

All fields are required. Log In

Retrieve your password

Please enter your username or email address to reset your password.

Log In
No Result
View All Result
  • Inicio
  • FDI
  • Gaza
  • Terrorismo
  • Mundo
  • Zona de guerra
  • Siria
  • Irán
  • Antisemitismo
  • Tecnología
  • Arqueología

© 2019 - 2025 Todos los derechos reservados.