La Fuerza Aérea de EE. UU. retirará 56 A-10 en 2025, reduciendo el inventario activo a 200 unidades, con un retiro completo antes de 2030.
Información sobre el futuro del A-10
La Fuerza Aérea planea reducir drásticamente su flota de A-10
En el año fiscal 2025, la Fuerza Aérea de los Estados Unidos tiene previsto retirar 56 unidades del A-10 Thunderbolt II, conocido como Warthog, lo que equivale a cerca del 20% del inventario restante. Con esta medida, el número total de A-10 en servicio activo se reducirá a aproximadamente 200 unidades.
Por otro lado, la Fuerza Aérea ha confirmado que retirará el último A-10 con base en Corea del Sur, reemplazándolos con F-16 Fighting Falcon. Estos aviones han sido mejorados con un software de capacidades similares a las de quinta generación.
A menos que ocurra un cambio inesperado en la política militar o surja un nuevo conflicto donde el A-10 sea crucial, la retirada total del Warthog podría completarse entre los años 2027 y 2029.
Aunque el momento exacto de su retiro final no está claro, las estimaciones actuales sugieren que la flota completa será retirada antes de 2030, considerando el ritmo actual de desmantelamiento.
El desmantelamiento del A-10 avanza con mayor rapidez
Durante 2023, la Fuerza Aérea retiró un total de 21 A-10, pero el proceso se ha acelerado significativamente desde entonces. En 2024 se prevé retirar 49 unidades, mientras que en 2025 serán 56, lo que representará un total combinado de alrededor de 100 aviones en solo dos años.
Durante años, Washington había bloqueado los intentos del Pentágono para retirar el A-10. Sin embargo, esta postura cambió recientemente, permitiendo que el retiro de la flota continúe sin oposición significativa.
En contraste, este año Washington rechazó las propuestas del Pentágono para retirar otros modelos, como los F-22 Raptor Block 20 y los F-15E Strike Eagle. No obstante, no hubo objeciones a la retirada de los Warthogs.
Con estos desarrollos, el futuro del A-10 parece estar cada vez más definido, con un retiro inminente del servicio activo.
Un comprador extranjero para el A-10 sigue siendo incierto
A pesar del avance en el desmantelamiento, hay indicios de que el A-10 podría encontrar un nuevo destino fuera de Estados Unidos. En abril de 2024, se informó sobre un posible comprador misterioso interesado en adquirir estos aviones. Sin embargo, hasta el momento no se ha revelado la identidad del país en cuestión ni se han conocido actualizaciones sobre el tema.
El secretario de la Fuerza Aérea, Frank Kendall, destacó en su momento que uno de los principales desafíos para un comprador extranjero sería la falta de soporte técnico y logístico. Según Kendall, “una vez que ese avión salga del inventario estadounidense, no habrá ningún apoyo de base para él”.
Además, Kendall señaló que el A-10 es un modelo antiguo, con más de 45 años de uso, y que las piezas de repuesto son extremadamente difíciles de conseguir. Esto complicaría su mantenimiento en cualquier otro país.
Otro obstáculo es que Ucrania, un potencial comprador mencionado en el pasado, no está interesada en adquirir el A-10 debido a que no es adecuado para operar en su entorno de amenazas actual.
Posibilidades futuras para el A-10 tras su retiro
Incluso después de su retirada, los A-10 podrían tener un destino alternativo. Muchos de ellos serán almacenados en el cementerio de aviones de Davis-Monthan, donde permanecerán durante años hasta ser finalmente desechados. Esto abre la posibilidad de que sean reincorporados si las circunstancias lo requieren en el futuro.
Por otro lado, no está descartado que los A-10 puedan ser utilizados para fines experimentales o como objetivos en ejercicios militares. Algunos aviones, como los F-16, han sido empleados en programas similares, como el QF-16 y el proyecto VENOM.
En resumen, aunque el retiro del A-10 Thunderbolt II parece inevitable, podrían surgir oportunidades para aprovechar sus capacidades en contextos específicos antes de su desaparición total.