Un análisis técnico sobre el desarrollo de la Empresa Aerotransportada Adaptable por el Mando de Operaciones Especiales de las Fuerzas Aéreas de EE. UU.
Análisis de la fase inicial de la Empresa Aerotransportada Adaptable
El Ala 27 de Operaciones Especiales y sus colaboradores industriales han ejecutado varias demostraciones de capacidades en diciembre de 2023, como parte del desarrollo de la Empresa Aerotransportada Adaptable (A2E) del Mando de Operaciones Especiales de las Fuerzas Aéreas (AFSOC). Estas actividades se alinean con la Estrategia de Defensa Nacional de EE. UU. de 2022, marcando un cambio significativo de enfoque desde operaciones contra organizaciones extremistas hacia la capacidad de enfrentar adversarios en entornos disputados o denegados.
El A2E representa una evolución en el uso del MQ-9, trascendiendo su rol tradicional en operaciones de Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento (ISR) y de ataque. Este programa se estructura en cinco fases, de las cuales las tres primeras ya están en curso. La primera fase implica la transición a una interfaz de mando y control del sistema de aeronaves no tripuladas (UAS) propiedad del gobierno, reemplazando el sistema de control RPA estacionario existente. Esta nueva interfaz A2E minimizará la huella operativa de una tripulación RPA tradicional, otorgando a los operadores la flexibilidad y movilidad para controlar varias aeronaves desde ubicaciones austeras.
Según Lindsay Scott, Mayor de las Fuerzas Aéreas de EE. UU. y Jefe de Desarrollo Rápido de Capacidades Autónomas del Cuartel General del AFSOC, el objetivo es adaptar las operaciones a entornos más desafiantes, asegurando siempre la aportación efectiva al espacio de batalla. Por su parte, el teniente general Tony Bauernfeind, comandante del AFSOC, enfatiza la importancia de la A2E para fortalecer la red de operaciones de la Fuerza Conjunta en todo el espectro del conflicto, siendo esta la prioridad de adquisición número uno del AFSOC.
Desarrollo de capacidades de control y manejo de UAS en el AFSOC
El Mayor de las Fuerzas Aéreas de EE. UU. Joshua Radford destaca el avance hacia una operación donde una tripulación o un único operador controle múltiples aeronaves, sin limitarse a una sola plataforma. El Capitán Mitch del AFSOC, coordinador del ejercicio asignado al 27º SOG, señala que el ejercicio Talon Spear tuvo como meta la integración de diversos sistemas, incluyendo sistemas de armas, cámaras específicas, sistemas informáticos a bordo y herramientas de conocimiento de la situación táctica.
En la segunda fase del programa A2E, el objetivo es permitir que una sola tripulación pilotee varios MQ-9, superando así el estándar histórico de una tripulación por aeronave. La tercera fase contempla que una sola tripulación controle varios tipos de UAS, desde los pequeños sistemas aéreos no tripulados (sUAS) del Grupo 1, como el RQ-11B Raven, hasta los UAS más grandes del Grupo 5, como el MQ-9A Reaper.
La cuarta fase del programa conlleva que una única tripulación controle formaciones de UAS desde ubicaciones móviles y austeras. Esto conducirá a la fase final, que contempla la creación de nuevas unidades ISR basadas en efectos, compuestas por UAS, fuerzas terrestres avanzadas, operadores cibernéticos y operadores espaciales, trabajando de manera colaborativa. Las demostraciones A2E realizadas en 2023 en Cannon AFB han validado muchas de estas capacidades en las primeras tres fases.
Implementación y futuras capacidades de la empresa A2E
En las demostraciones de diciembre, una tripulación RPA del 27º SOW demostró la capacidad de controlar tres MQ-9 con una única interfaz de control y de desplegar un sUAS del Grupo 2 desde un MQ-9A. Se espera que la próxima demostración A2E tenga lugar en el verano de 2024. Con el desarrollo de estas capacidades, las tripulaciones podrán controlar enjambres de vehículos aéreos desde cualquier lugar.
Además, el AFSOC aspira a continuar desarrollando y adquiriendo plataformas compatibles con A2E, permitiendo al MQ-9 actuar como “nave nodriza” para el mando y control de sUAS y municiones de retardo, así como de nodo de transporte de datos para redes de malla. Estas redes, junto con tecnologías de Inteligencia Artificial y una avanzada Interfaz Hombre-Máquina, facilitarán a las tripulaciones del AFSOC operar múltiples UAS grandes y pequeños de manera simultánea, aumentando la cobertura de terreno y la persecución de objetivos en entornos actualmente inaccesibles.
La colaboración con socios de la industria de defensa y comandos aéreos innovadores será clave para transformar la actual empresa MQ-9 del AFSOC en la robusta arquitectura de UAS necesaria para proporcionar potencia aérea especializada en los combates actuales y futuros, en cualquier lugar y momento.