Corea del Sur se apresta a lanzar su segundo satélite espía desde Florida, buscando fortalecer la vigilancia sobre Corea del Norte.
El inminente lanzamiento del segundo satélite espía de Corea del Sur, previsto para el 8 de abril desde el Centro Espacial John F.
Kennedy, Florida, señala un paso crucial en sus esfuerzos por reforzar la vigilancia sobre Corea del Norte. Este lanzamiento es parte de la estrategia surcoreana de desplegar un total de cinco satélites para 2025, con el fin de potenciar sus capacidades de reconocimiento espacial.
Equipado con tecnología de punta, incluyendo sensores electroópticos e infrarrojos, este satélite promete entregar imágenes detalladas del terreno norcoreano.
Tras capturar imágenes de alta resolución de Pyongyang con su primer satélite, Corea del Sur anticipa que la misión alcanzará plena operatividad en junio.
Los siguientes satélites, dotados de sensores de radar de apertura sintética, permitirán la recopilación de datos constante, sin importar las condiciones meteorológicas. Analistas prevén que, con la operación coordinada de estos satélites, Corea del Sur podrá realizar vigilancia sobre Corea del Norte cada dos horas, mejorando así su conocimiento situacional.
Paralelamente, Corea del Norte también ha intensificado sus esfuerzos por ampliar sus capacidades de reconocimiento espacial, lanzando su primer satélite espía militar en noviembre.
Sin embargo, aún se cuestionan las capacidades reales de este satélite. A pesar de los planes norcoreanos de continuar con los lanzamientos, Corea del Sur aún no ha observado preparativos inminentes para tales acciones.
Este desarrollo llega en un momento de tensiones continuas en la península coreana, destacando el compromiso de Corea del Sur con la mejora de su seguridad nacional a través de la inversión en vigilancia espacial, y subrayando su determinación para mantenerse informado sobre los movimientos de Corea del Norte.