Un destructor de la Armada de EE. UU. interceptó misiles, posiblemente dirigidos a Israel, lanzados por rebeldes hutís yemeníes respaldados por Irán.
El USS Carney, un destacado buque de guerra de la Armada estadounidense, logró interceptar con éxito tres misiles lanzados por los rebeldes hutís, apoyados por Irán, desde Yemen, según informes del Pentágono. Esta crucial intervención ocurrió mientras la nave se encontraba patrullando el mar Rojo.
El general de brigada Pat Ryder, vocero del Pentágono, confirmó en una rueda de prensa que los misiles de crucero y varios drones lanzados por los hutís fueron neutralizados sobre aguas internacionales. “La trayectoria y el lanzamiento de estos misiles y drones desde Yemen hacia el norte a través del mar Rojo sugieren posibles intenciones de atacar objetivos en Israel”, explicó Ryder.
Los misiles fueron derribados dada su amenaza potencial, basándose en sus perfiles de vuelo. Ryder enfatizó que Estados Unidos adoptará todas las medidas necesarias para “salvaguardar a nuestros aliados y proteger nuestros intereses en la región”. Mientras tanto, sigue en curso la evaluación de los objetivos específicos de los misiles interceptados.
Informes de Israel, específicamente de Canal 13, incluyen evaluaciones anónimas que sugieren que Israel era probablemente el objetivo de los misiles. Además, fuentes anónimas israelíes informaron a Army Radio y Walla que los misiles tenían la dirección del estado judío.
En el contexto de la tensión entre Israel y Hamás, los rebeldes hutís han mostrado abiertamente su apoyo a los palestinos, adoptando un lema provocativo: “Muerte a América, Muerte a Israel, Maldición a los judíos, Victoria del Islam”. Irán, por su parte, ha insinuado que las acciones de Israel contra los terroristas en Gaza podrían provocar amenazas más severas, subrayando el ataque de Hamás del 7 de octubre, queasesinaron a más de 1400 personas.
Tanto el ayatolá Alí Jamenei como el presidente iraní, Ebrahim Raisi, han advertido sobre las consecuencias de la continuación de los conflictos, sugiriendo una posible expansión de la guerra si no se alcanza una solución política.
La situación en Yemen también es volátil, con manifestaciones en apoyo a Palestina e Irán en Saná, controlada por los hutís. Abdel-Malek al-Hutí, cabeza del grupo rebelde, ha amenazado con represalias contra Estados Unidos, incluyendo el lanzamiento de drones y misiles.
Israel ha mantenido una campaña de ataques aéreos desde el 7 de octubre, respondiendo a una incursión masiva de terroristas que masacraron a más de 1.400 personas. Los esfuerzos de Israel están dirigidos a desmantelar la infraestructura de Hamás, prometiendo erradicar la organización terrorista. En respuesta, se reportan aproximadamente 3.700 bajas en Gaza debido a los bombardeos israelíes.