Se reportaron drones pequeños sobre bases estadounidenses en el Reino Unido, incluyendo RAF Fairford. Tropas británicas fueron desplegadas en respuesta.
Detalles sobre el incidente con drones
Drones detectados en bases militares de Estados Unidos en Reino Unido
Las Fuerzas Aéreas de Estados Unidos en Europa (USAFE) informaron sobre la presencia de drones pequeños y misteriosos en las inmediaciones de varias bases militares estadounidenses en el Reino Unido. Según el reporte, por primera vez se detectaron drones en la base RAF Fairford, ubicada a unas 130 millas, donde actualmente están desplegados cuatro bombarderos B-52 como parte de la Fuerza de Tarea de Bombarderos 25-1.
Autoridades del Reino Unido confirmaron que, en respuesta a estas incursiones, se han enviado aviones de combate y se ha desplegado personal militar británico en las bases afectadas. Este incidente marca una nueva preocupación para la seguridad en estas instalaciones.
La USAFE había informado inicialmente sobre la actividad de drones en las bases RAF Lakenheath, RAF Mildenhall y RAF Feltwell entre el 20 y el 24 de noviembre. Estos drones, que variaban en tamaño y configuración, aún no han sido identificados, y su propósito sigue siendo un misterio.
El 26 de noviembre, una actualización oficial de la USAFE añadió que las incursiones continuaban y que la RAF Fairford también había sido incluida entre las bases afectadas. Según la declaración oficial, “ninguna de las incursiones afectó a los residentes, instalaciones o activos de la base”.
Reacción de autoridades y preocupaciones locales
El Parlamento del Reino Unido abordó el 27 de noviembre el tema de las defensas aéreas y antimisiles tras los reportes de drones. Durante la sesión, el diputado Nick Timothy, representante de la zona de Lakenheath y Mildenhall, expresó que los residentes estaban inquietos por escuchar aviones despegando en la noche para interceptar los drones.
Las declaraciones del diputado Timothy coincidieron con los reportes de los medios, que indicaron que cazas habían sido enviados desde Lakenheath. Estas acciones resaltan los desafíos que enfrentan los comandantes al operar bajo estrictas regulaciones de seguridad civil.
Aunque la USAFE no ha detallado las defensas empleadas, declaró que “nos reservamos el derecho de proteger nuestras instalaciones”. Esto refleja las limitaciones impuestas por el control del espacio aéreo del Reino Unido, gestionado por la Autoridad de Aviación Civil, similar al rol de la FAA en Estados Unidos.
Las bases, ubicadas cerca de áreas densamente pobladas, enfrentan dificultades adicionales, ya que las opciones para contrarrestar drones son restringidas. Esto afecta tanto las operaciones militares como la seguridad general en las instalaciones.
Despliegue de tropas británicas para enfrentar la amenaza
El 27 de noviembre, la BBC y Sky News informaron que aproximadamente 60 tropas británicas, algunas con experiencia en la lucha contra drones, se desplegaron para apoyar las operaciones de seguridad en las bases. Estas acciones forman parte de la respuesta coordinada ante las recientes incursiones.
Este incidente en el Reino Unido guarda similitudes con eventos ocurridos hace un año en bases militares estadounidenses. En ese momento, drones desconocidos sobrevolaron la Base Conjunta Langley-Eustis, en Virginia, donde se encuentran los F-22 Raptor de la Fuerza Aérea. A día de hoy, las autoridades aún no han identificado a los responsables de esos hechos, según un informe del Wall Street Journal.
En mayo de este año, un alto funcionario de defensa declaró que el Pentágono registra entre dos y tres incidentes semanales de drones volando cerca de bases militares estadounidenses. Sin embargo, no se especificaron las ubicaciones exactas de estos eventos.
La amplia disponibilidad de drones comerciales de bajo costo a nivel mundial ha intensificado las preocupaciones sobre su uso para espionaje o para interrumpir actividades militares, tanto en tiempos de paz como de conflicto.
Búsqueda de soluciones para contrarrestar drones
Durante años, la Fuerza Aérea de Estados Unidos ha trabajado en el desarrollo de soluciones efectivas y económicas para protegerse de drones y enjambres de drones. La prioridad ha sido evitar el uso de misiles avanzados y costosos, buscando alternativas más viables.
Además, la Fuerza Aérea ha intentado asumir un rol más protagónico en la defensa de sus bases aéreas. Esta tarea, tradicionalmente asignada al Ejército, podría ayudar a gestionar mejor las amenazas emergentes en el espacio aéreo cercano a las instalaciones militares.
La naturaleza impredecible de los drones, combinada con las limitaciones operativas en áreas densamente pobladas, ha complicado la implementación de medidas de seguridad efectivas. Sin embargo, los esfuerzos continúan, con un enfoque en tecnologías que puedan neutralizar estas amenazas sin poner en riesgo la seguridad de los civiles.
Los recientes incidentes subrayan la creciente necesidad de mejorar las capacidades de defensa contra drones y de reforzar la cooperación entre las fuerzas armadas y las autoridades civiles encargadas del control del espacio aéreo.