El Departamento de Estado autorizó la venta de 400 bombas guiadas GBU-39B y equipos relacionados a Rumania por 84 millones de dólares, fortaleciendo su capacidad de defensa.
Rumania adquirirá bombas de precisión y equipo militar
Estados Unidos aprobó una posible venta de bombas de pequeño diámetro GBU-39B y equipo relacionado a Rumania, con un valor estimado de 84 millones de dólares. La Agencia de Cooperación para la Seguridad de la Defensa notificó al Congreso sobre el acuerdo, luego de que el Departamento de Estado diera su visto bueno.
El paquete incluye 400 bombas GBU-39B SDB-I, dos bombas de entrenamiento inertes GBU-39 [T-1]/B con espoletas, así como munición de entrenamiento y equipos de prueba. Además, se proporcionarán adaptadores de prueba de computadora, contenedores y repuestos.
El acuerdo contempla también apoyo logístico, capacitación para el personal, documentación técnica y servicios de transporte. Tanto el gobierno de Estados Unidos como contratistas privados ofrecerán estos servicios adicionales.
El contratista principal de la venta será The Boeing Company, con sede en St. Louis, Missouri. Esta transacción refuerza los lazos estratégicos entre Washington y Bucarest, al mejorar la capacidad de defensa rumana en un contexto de crecientes amenazas en la región.
Fuerza Aérea Rumana fortalecerá su capacidad de ataque
La incorporación de las GBU-39B representa un avance en las capacidades de ataque de precisión de Rumania. Estas bombas permitirán ampliar las opciones de ataque aéreo y mejorar la flexibilidad estratégica de sus fuerzas.
Los principales aviones encargados de transportar estas municiones serán los F-16 Fighting Falcons de la Fuerza Aérea Rumana. Estos cazas, adquiridos a Portugal y modernizados bajo estándares de la OTAN, se beneficiarán de una mayor capacidad ofensiva con la integración del GBU-39B.
Características clave de las GBU-39B en la Fuerza Aérea Rumana
- Capacidad de carga: Permite a los F-16 transportar más bombas por misión.
- Precisión: Minimiza daños colaterales y mejora la efectividad en combate.
- Diseño compacto: Reduce la detección por radar y mejora la supervivencia en misiones.
- Interoperabilidad: Compatible con sistemas de la OTAN, facilitando operaciones conjuntas.
El diseño compacto y la baja firma de radar del SDB-I proporcionan ventajas tácticas, al dificultar la detección y neutralización de los ataques.
Modernización y expansión de la flota de F-16 en Rumania
Desde 2016, Rumania ha expandido su flota de F-16 con la adquisición de aviones a Portugal, reemplazando aeronaves de la era soviética. La integración de estos cazas ha fortalecido sus capacidades defensivas y ofensivas.
Los F-16 adquiridos son modelos F-16AM/BM Fighting Falcon, equipados con radar AN/APG-66(V)2, que permite detectar y rastrear múltiples objetivos. Además, cuentan con motores General Electric F110-GE-100, que ofrecen alta maniobrabilidad y velocidad.
En términos de armamento, estos aviones pueden emplear misiles AIM-9 Sidewinder y AIM-120 AMRAAM para combate aire-aire, así como bombas guiadas JDAM y misiles AGM-65 Maverick para ataques terrestres.
Importancia estratégica de los F-16 en la región
Los F-16 de Rumania han sido desplegados en diversas bases aéreas, como la 71ª Base Aérea «general Emanoil Ionescu» en Câmpia Turzii, donde han participado en ejercicios de la OTAN y misiones de policía aérea, especialmente ante la actividad aérea rusa.
El entrenamiento de los pilotos ha sido clave en la integración de los F-16. Los aviadores rumanos han recibido instrucción tanto en su país como en el extranjero, utilizando simuladores de vuelo avanzados para mejorar sus habilidades de combate.
La adquisición de estos cazas no solo ha fortalecido las capacidades de la Fuerza Aérea Rumana, sino que también ha consolidado su papel dentro de la OTAN. Además, Rumania se ha convertido en un centro regional de entrenamiento para pilotos de F-16, contribuyendo a la formación de aviadores ucranianos en el marco de las estrategias de apoyo de la alianza.
Con estas adquisiciones y mejoras, Rumania se posiciona como un actor clave en la seguridad del este de Europa, reforzando su defensa aérea y asegurando su capacidad de respuesta ante posibles amenazas en la región.