El Ejército de Tierra otorga contratos a cuatro compañías líderes para la construcción de prototipos robóticos militares, con una inversión cercana a los 24,72 millones de dólares.
Destacadas compañías en diseño robótico ganan licitación
Como parte del Programa de Registro basado en el Acuerdo de Otras Transacciones (OTA) de Sistemas de Vehículos Terrestres (GVS), cuatro empresas destacadas obtuvieron acuerdos. Entre ellas: McQ, Inc.; Textron Systems Corporation; General Dynamics Land Systems y Oshkosh Defense, LLC.
Estos acuerdos, que suman aproximadamente 24,72 millones de dólares, buscan que las empresas produzcan y entreguen dos prototipos de plataformas vehiculares robóticas antes de agosto de 2024.
El objetivo principal es apoyar las pruebas de movilidad y tener una interacción directa con los soldados, buscando cumplir con las necesidades del Ejército respecto a vehículos robóticos ligeros y actualizables.
El prototipo RCV-Light y el Ejército del 2030
Este avance tecnológico forma parte del programa RCV-Light (RCV(L)). Una estrategia que busca implementar soluciones de prototipado rápido para las capacidades que el Ejército espera tener operativas para el año 2030.
Según el general de brigada Geoffrey Norman, “la unión entre humanos y máquinas definirá el éxito en los combates terrestres futuros. Implementar RCV en nuestras filas dará a nuestros soldados herramientas avanzadas para enfrentar los retos cambiantes de la guerra”.
Por su parte, el General de División Glenn Dean enfatizó la importancia de las tecnologías avanzadas para el futuro del Ejército, indicando la necesidad de trabajar tanto con empresas tradicionales como no tradicionales en el desarrollo de estos sistemas.
Lecciones aprendidas y proyecciones al 2030
El proceso actual toma en cuenta las experiencias anteriores. Como menciona Steve Herrick, jefe del proyecto de Vehículos Robóticos de Combate, se están aplicando lecciones de prototipos previos y pruebas operacionales realizadas en el Centro Nacional de Entrenamiento en Fort Irwin, California.
Esta iniciativa representa el cambio oficial desde la experimentación hacia la implementación de una plataforma RCV funcional en el campo de batalla antes del año 2030.
Con estos avances, el Ejército de Tierra busca no solo mejorar sus capacidades de combate, sino también prepararse para los desafíos tecnológicos y tácticos de las próximas décadas.
RCV-Light: Cambiando la dinámica del combate moderno
El RCV-Light promete transformar el panorama militar al proporcionar mayor conocimiento situacional, letalidad y opciones tácticas a las formaciones del Ejército. Estas máquinas serán operadas a distancia o funcionarán de manera semiautónoma. Dependiendo de sus variantes, actuarán como “exploradores” o “escoltas” para vehículos tripulados.
Después de completar la Fase I, el Ejército se dirigirá hacia la Fase II, con la expectativa de seleccionar un único adjudicatario en 2025. Esta selección culminará en la construcción y entrega de hasta nueve prototipos para el año fiscal 2026. Basado en las pruebas de estos sistemas, se decidirá su producción masiva para 2027.
Una herramienta de negocio llamada Other Transaction Authority (OTA) fue la que permitió al Ejército seleccionar a sus proveedores para la Fase I. Esta estrategia de adquisición busca colaborar con contratistas no tradicionales. También es importante mencionar que, recientemente, firmaron tres OTA para desarrollar software autónomo para el RCV.
Capacidades y funcionalidades del RCV
Los Vehículos Robóticos de Combate (RCV) representan una revolución en el teatro de guerra. Estas plataformas no tripuladas vienen en diferentes configuraciones: ligeras, medianas y pesadas. Su principal aporte es su capacidad de aportar letalidad al ofrecer rápidamente información situacional, permitiendo a los mandos utilizar sistemas de armas externos o embarcados.
Además, los RCV cuentan con cargas útiles modulares (MMP) que brindan acceso a capacidades avanzadas, como guerra electrónica y sistemas aéreos no tripulados a nivel de pelotón. Así, los RCV son útiles en todas las fases de operaciones multidominio: competir, penetrar, desintegrar, explotar y recompetir.
El programa RCV se encuentra dentro de los sistemas de modernización “24 en 23” del Ejército. Se espera que estos prototipos lleguen a manos de los soldados para el año fiscal 2023. Los prototipos ya han estado en manos de las tropas desde 2022, culminando con una rotación en el NTC en septiembre de 2023.