La Fuerza Aérea de los Estados Unidos ha anunciado que los Escuadrones de Pruebas y Evaluación 422 y 59 demostraron que los vehículos blindados modernos equipados con Blindaje Reactivo Explosivo siguen siendo vulnerables al GAU-8 Avenger del A-10C Thunderbolt II.
Esta primera prueba se llevó a cabo en el Campo de Pruebas y Entrenamiento de Nevada, entre el 14 y el 25 de febrero de 2022, según un comunicado de prensa.
Cada misión de prueba incluyó una nave de dos A-10C empleando rondas incendiarias perforantes de blindaje contra dos tanques de batalla principales sustitutos equipados con ERA. Los pilotos variaron los parámetros y la dirección del ataque para evaluar los efectos de las armas contra los objetivos blindados.
Mediante el análisis posterior a los disparos del vídeo, las imágenes fotográficas y la inspección visual de los objetivos, los analistas pudieron determinar los daños de batalla infligidos a los carros de combate y determinar que los carros quedaron inoperativos.
“Un empleo típico del cañón del A-10 utiliza 120 rondas, lo que significa que un A-10 es capaz de emplear disparos sobre nueve o diez objetivos antes de agotar sus municiones del cañón”, dijo el mayor Kyle Adkison, comandante de la división A-10C del 422.º TES. “Contra grandes fuerzas sobre el terreno, las formaciones de A-10 son capaces de enfrentarse a casi 40 vehículos blindados con municiones de 30 milímetros. Esa es una cantidad significativa de potencia de fuego”.
Además de las municiones de 30 milímetros, la prueba también recogió datos sobre la eficacia de los sistemas de armas AGM-65L Maverick y AGR-20E Advanced Precision Kill contra vehículos blindados.
“Este ha sido un esfuerzo de prueba continuo desde que la idea se originó en 2020”, dijo el teniente primero Christopher Earle, analista de pruebas de operaciones del 59.º TES A-10C. “Ahora que ha llegado a buen puerto y se ha demostrado su éxito, trabajaremos para probar otros tipos de municiones antiblindaje del inventario de la Fuerza Aérea contra el ERA y recopilaremos más datos”.
El A-10 es muy adecuado para las funciones de empleo de combate ágil, y esta prueba demuestra que el A-10 puede seguir ofreciendo una potencia de fuego rápida y masiva con efectos devastadores sobre los vehículos enemigos en un entorno disputado.
A lo largo de la duración de la prueba se incluyeron múltiples organismos, como el 422.º TES, el 59.º TES, el 53.º Grupo de Pruebas y Evaluación y la División de Análisis y Armamento Operativo del Centro de Gestión del Ciclo de Vida de la Fuerza Aérea.