U.S. Marine Corps y Ejército despliegan NMESIS y HIMARS en Filipinas para simulacros antibuque en KAMANDAG 9, enfocados en el estrecho de Luzón.
Despliegue de sistemas de misiles en KAMANDAG 9 fortalece alianza
El Cuerpo de Marines de EE. UU. y el Ejército estadounidense desplegaron sistemas de misiles avanzados en las islas Filipinas para el ejercicio militar KAMANDAG 9, realizado del 26 de mayo al 6 de junio de 2025. El Navy-Marine Expeditionary Ship Interdiction System (NMESIS), un sistema antibuque no tripulado, y el High Mobility Artillery Rocket System (HIMARS) se posicionaron en puntos estratégicos entre Luzón y Taiwán para practicar operaciones de negación marítima. Este despliegue tuvo lugar en las islas Batanes, el territorio más septentrional de Filipinas, y marcó un hito en la cooperación militar entre EE. UU. y Filipinas. Las maniobras se centraron en el estrecho de Luzón, un corredor marítimo de 250 kilómetros de ancho crítico para el comercio y la estrategia militar en el Indo-Pacífico.
El 3.er Regimiento Litoral de Marines (3rd MLR) lideró el despliegue del NMESIS, que utiliza misiles Naval Strike Missiles de KONGberg con un alcance de 185 kilómetros. Este sistema, montado en vehículos tácticos ligeros no tripulados, permite atacar objetivos marítimos con alta precisión y baja detectabilidad. Durante el ejercicio, el NMESIS se transportó a Batanes mediante aviones C-130 de la Fuerza Aérea de EE. UU., específicamente del 39th Airlift Squadron. Las operaciones incluyeron simulaciones de ataques marítimos coordinados con sensores terrestres y drones, demostrando la capacidad de controlar el estrecho desde posiciones dispersas.
El HIMARS, operado por el Ejército de EE. UU., complementó las capacidades del NMESIS. Transportado por activos de las Fuerzas Armadas de Filipinas, como embarcaciones logísticas de la clase Balikpapan y Bacolod City, el HIMARS ensayó ataques de precisión en el estrecho. Este sistema, que pronto integrará el Precision Strike Missile con un alcance de hasta 500 kilómetros, permite neutralizar objetivos navales desde tierra. Su despliegue en Batanes y las Islas Babuyan aprovechó experiencias previas en Balikatan 2024, donde se trasladó por vía marítima.
El ejercicio KAMANDAG 9 abarcó múltiples regiones del archipiélago filipino, incluidas Luzón, Batanes, Tawi-Tawi y Palawan. Las actividades incluyeron operaciones de seguridad en terrenos marítimos clave, simulacros de contradesembarco con fuego real, maniobras litorales, operaciones anfibias y ejercicios de asistencia humanitaria. Fuerzas de Japón y Corea del Sur participaron en entrenamientos anfibios en Palawan, frente al mar de China Meridional, un área estratégica para contrarrestar tensiones regionales.
Datos clave sobre el despliegue en KAMANDAG 9
- El NMESIS se desplegó por primera vez en Batanes durante Balikatan 2025, marcando su debut operativo en el estrecho de Luzón.
- El HIMARS se transportó por embarcaciones filipinas, incluyendo naves de la clase Balikpapan, usadas en ejercicios previos.
- El 3rd MLR operó una red de sensores y drones en Batanes y Babuyan, incluyendo la isla Mavulis, a 88 millas de Taiwán.
- El ejercicio involucró a cerca de 17,000 tropas, con participación de Australia y Japón, y observadores de 15 países.
- El NMESIS puede atacar objetivos marítimos a 185 km, mientras que el HIMARS alcanzará 500 km con futuros misiles.
Avances previos en Balikatan 2025 y su impacto en KAMANDAG
El despliegue del NMESIS en Batanes durante Balikatan 2025, del 21 de abril al 9 de mayo, sentó las bases para su uso en KAMANDAG 9. En Balikatan, el 3rd MLR transportó el sistema a la isla de Batan utilizando C-130J Super Hercules, integrándolo en operaciones de seguridad marítima. Este ejercicio incluyó simulaciones de Defensa, costera y un ejercicio de hundimiento (SINKEX) con la participación de aviones F/A-18C/D Hornets del VMFA-323, junto a fuerzas de Filipinas, Japón y Australia. Aunque los misiles Naval Strike Missiles no se dispararon en vivo, las simulaciones probaron la capacidad del sistema para operar en entornos disputados.
El HIMARS también tuvo un rol destacado en Balikatan 2025, donde se trasladó a Batanes mediante embarcaciones filipinas. Este ejercicio demostró la interoperabilidad entre las fuerzas estadounidenses y filipinas, con la 4ta Brigada de Marines de Filipinas colaborando en operaciones litorales. Además, el 3rd MLR empleó el radar AN/TPS-80 Ground/Air Task-Oriented Radar para vigilancia del espacio aéreo y coordinación de ataques marítimos, mejorando la conciencia situacional en el estrecho.
La Marine Air Defense Integrated System (MADIS), un sistema antidrones, se integró por primera vez en Balikatan 2025 y se utilizó nuevamente en KAMANDAG 9. Operado por el 3rd Littoral Anti-Air Battalion, el MADIS proporcionó defensa aérea táctica, permitiendo al NMESIS y al HIMARS operar con mayor seguridad en entornos litorales. Este sistema se probó en ejercicios de fuego real en Pohakuloa, Hawái, antes de su despliegue en Filipinas.
El 3rd MLR también debutó la Littoral Rotational Force-Luzon durante Balikatan 2025, una unidad diseñada para operaciones ágiles en entornos insulares. Esta fuerza se mantuvo activa en KAMANDAG 9, coordinando movimientos entre Batanes y Luzón con apoyo aéreo del 25th Combat Aviation Brigade del Ejército de EE. UU. y la Fuerza Aérea filipina.
Contexto estratégico y capacidades operativas
El estrecho de Luzón, ubicado entre Filipinas y Taiwán, es un punto crítico para las rutas marítimas globales y las operaciones militares en el Indo-Pacífico. Desde Batanes, los sistemas NMESIS y HIMARS pueden cubrir todo el estrecho, proporcionando capacidades de negación marítima y control de accesos. La isla Mavulis, a solo 88 millas de Taiwán, sirvió como base para sensores y drones, extendiendo la vigilancia del 3rd MLR hacia el norte.
El NMESIS y el HIMARS forman parte de la estrategia de Fuerza de Diseño 2030 del Cuerpo de Marines, que prioriza operaciones distribuidas y bases avanzadas expeditivas (EABO). Estas capacidades permiten a las fuerzas estadounidenses operar dentro de entornos disputados, utilizando sistemas móviles y de baja firma para contrarrestar amenazas navales. La integración de sensores como el AN/TPS-80 y drones RQ-20B PUMA mejora la capacidad de las unidades para detectar y atacar objetivos en tiempo real.
Las Fuerzas Armadas de Filipinas desempeñaron un papel clave en el transporte y la logística, utilizando buques como los de la clase Balikpapan, adquiridos de Australia, y los de la clase Bacolod City, derivados de diseños estadounidenses. Estas embarcaciones facilitaron el movimiento de los sistemas de misiles y personal a través del archipiélago, demostrando la interoperabilidad entre ambos países.
El ejercicio KAMANDAG 9 también incluyó la participación de la Fuerza de Rotación de Marines-Darwin (MRF-D), que operó desde Palawan y Tawi-Tawi. Esta unidad practicó el comando y control a nivel de cuerpo, coordinando operaciones en múltiples dominios con aliados como Japón y Corea del Sur. Las maniobras en Palawan, frente al mar de China Meridional, incluyeron simulacros anfibios con la Japan Ground Self-Defense Force y la Republic of Korea Marine Corps, reforzando la presencia aliada en la región.