El Ejército está reconsiderando su estrategia de pruebas para su arma hipersónica de largo alcance, el Dark Eagle, después de varias dificultades y retrasos. Se espera que los misiles estén operativos para el verano próximo.
Reprogramación de pruebas tras la suspensión
Diversas pruebas de vuelo del Dark Eagle se han cancelado, la más reciente programada para el 26 de octubre. Ahora, los oficiales están trazando una nueva estrategia.
El subsecretario del Ejército para Adquisiciones, Logística y Tecnología, Doug Bush, informó a DefenseScoop que se llevó a cabo una “gran reunión” la semana pasada. En esta reunión participaron su homólogo de la Armada Frederick “Jay” Stefany, sus adjuntos militares y el contratista principal Lockheed Martin.
El Ejército y la Armada están trabajando juntos en el desarrollo de la tecnología hipersónica. “Es un programa conjunto”, explicó Bush durante una entrevista en el Foro de Defensa Nacional Reagan. “Así que fuimos yo mismo, el Sr. Stefany, los dos oficiales de tres estrellas y Lockheed los que trabajamos para averiguar qué había pasado exactamente y, al mismo tiempo, elaborar el nuevo calendario de pruebas”.
El objetivo es realizar pruebas más agresivas del misil mientras se investiga el problema con el lanzador. Una vez que se tenga confianza en ambos, se programará una prueba operativa usando todo el equipo real.
Prioridad de adquisición: Armas hipersónicas
Las armas hipersónicas, diseñadas para volar a más de Mach 5 y superar las defensas aéreas enemigas, son una de las principales prioridades de adquisición del ejército estadounidense. El costoso programa Dark Eagle es una parte crucial de la cartera de modernización de fuegos de largo alcance del Ejército.
Los competidores de Estados Unidos, China y Rusia, también están persiguiendo la hipersónica y el Pentágono está intentando mantener el ritmo.
El programa Dark Eagle ha tenido mucha concurrencia debido a la necesidad del Ejército de avanzar rápidamente. Bush señaló que a veces funciona y a veces no. Sin embargo, expresó confianza en que encontrarán el problema una vez que los equipos estén completamente sincronizados e integrados.
Se espera que las pruebas de los subcomponentes ayuden a construir confianza antes de gastar más dinero en otra prueba operativa. Esto retrasará un poco el proceso, pero la esperanza es que en 2024 se pueda realizar una prueba operativa completa para dar el visto bueno al despliegue.
Objetivos futuros y desarrollo de tecnología
El objetivo inicial era tener el sistema listo antes del final del año fiscal 2023. Mientras tanto, el Ejército está trabajando en un esfuerzo separado de modernización de fuegos de largo alcance conocido como el programa de Misiles de Ataque de Precisión (PrSM).
Para el segundo incremento del PrSM, el servicio planea equipar el sistema con un buscador multimodo que permitiría al arma atacar buques en el mar.
DefenseScoop preguntó a Bush si, en el futuro, el Ejército podría integrar ese tipo de tecnología en el Dark Eagle para dotarlo de capacidad antibuque. Aunque aún no se ha tomado una decisión al respecto, Bush indicó que están considerando trabajar con la Armada para mejorar el Dark Eagle con futuros bloques, especialmente el cuerpo de planeo.
Si el arma funciona y se sienten seguros con ella, y los militares deciden que vale la pena desarrollar una versión antibuque, es algo que podrían hacer… potencialmente.